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Los extranjeros hacen el 45% de las denuncias por discriminación en Barcelona

Lluís Pellicer

La vulneración de los derechos laborales y de la dignidad personal son las discriminaciones más denunciadas en Barcelona, según un informe sobre las quejas recogidas en la Oficina para la No Discriminación (OND) de la ciudad en 2004. El organismo, que depende del Ayuntamiento de Barcelona, atendió el año pasado a 1.230 personas, un 7% más que el año anterior. Casi la mitad de las denuncias registradas (45%) fueron interpuestas por inmigrantes. Les siguieron otros colectivos, sobre todo personas con discapacidades o problemas mentales (15%), homosexuales (6,8%) y gente que padece enfermedades crónicas (4%).

La OND es la primera oficina europea de ámbito municipal que se orienta a la defensa de los derechos de los ciudadanos, en especial de los que pertenecen a colectivos que puedan ser discriminados por razón de sexo, salud física y mental, edad y procedencia geográfica. "La oficina se ha configurado como un recurso importante en política de inmigración, sobre todo para luchar contra el racismo y la xenofobia, pero también para proteger los derechos civiles de todos los ciudadanos", explicó la concejal de Mujer y Derechos Civiles de Barcelona, Pilar Valluger.

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El derecho a la dignidad, que centra el 22% de las quejas trasladadas a la OND, es el más vulnerado en la capital catalana. Pero se dan casos curiosos. "Una mujer denunció un robo en la comisaría de la Verneda. La retuvieron por no tener los papeles en regla y tramitaron su expulsión", explicó una portavoz de la concejalía. Los derechos laborales son la segunda causa de denuncia (17,5%). La mayoría de las quejas fueron motivadas por anuncios que restringían las ofertas de trabajo a un sexo, edad o nacionalidad.

La oficina actúa también por oficio tras observar una práctica que se generaliza o bien a partir de las denuncias que aparecen en los medios de comunicación. Es el caso de las estafas o discriminaciones en el mercado de la vivienda. "Intervenimos de oficio cuando queremos resolver una práctica grave y recurrente o bien cuando buscamos una sentencia ejemplar de un tribunal", añadió.

El procedimiento más corriente es que el ciudadano que haya sufrido algún tipo de discriminación contacte con la OND. Los abogados de la oficina -especializados en derecho laboral, penal y extranjería- aconsejan a los afectados e intentan resolver el caso a través de la mediación. Un 33% de las denuncias presentadas en 2004 se zanjaron a través de un acuerdo entre ambas partes. Si este método no permite acabar con el conflicto, se recomienda acudir a los tribunales. "No obstante, aún tenemos muchos casos en los que la parte demandante acaba desistiendo", lamenta Vallugera.

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

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