La guerrilla asesina a 17 campesinos en el norte de Colombia
Al menos 17 campesinos fueron asesinados en la Nochevieja en una zona rural del noroeste colombiano. Al parecer, la matanza fue perpetrada por guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), según las primeras informaciones de la policía, basadas en el testimonio de un superviviente que ha sido hospitalizado con heridas de gravedad. El comandante de las fuerzas de seguridad en Arauca, coronel Rodrigo Palacio, dijo que las víctimas eran campesinos que estaban cuidando una finca y festejando la Nochevieja, y que fueron sorprendidos y acusados por los guerrilleros de colaborar con los grupos paramilitares. Arauca es un departamento al noreste de Colombia, en la frontera con Venezuela.
Entre las personas muertas hay cuatro menores de edad y seis mujeres. Palacio aseguró a la emisora Caracol que soldados, policías y agentes de la fiscalía habían sido trasladados a la zona para iniciar la investigación correspondiente. En la zona también opera el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el segundo grupo insurgente más numerosa del país. Los hechos ocurrieron en Puerto San Salvador, un apartado lugar a unos 380 kilómetros al noreste de Bogotá, sobre el río Casanare, única vía de acceso al lugar.
Extradición a EE UU
La masacre se produce después de que Simón Trinidad, reconocido líder de las FARC, de 54 años, detenido hace un año en Quito (Ecuador), fuera extraditado el pasado viernes a Estados Unidos para ser juzgado. Con chaleco antibalas, esposado, rodeado de corpulentos guardianes, subió las escalerillas del avión de la DEA (Agencia Antidrogas estadounidense) que lo esperaba en Bogotá, pasada la una de la tarde del último día del año. Trinidad, economista, ex gerente de banco, uno de los negociadores en los fallidos diálogos de paz con el anterior Gobierno, rendirá cuentas por cargos de narcotráfico, secuestro de norteamericanos y apoyo al terrorismo.
El comandante insurgente, que llevaba 17 años en la guerrilla, ha repetido que demostrará que los cargos son falsos. La extradición del llamado "burgués de la guerrilla", miembro de una familia acomodada, se ejecutó 13 horas después de que venciera el plazo dado por el Gobierno para que las FARC liberaran a 65 secuestrados, entre ellos tres norteamericanos y un alemán, y poder frenar así la entrega a la justicia norteamericana de su líder. El Gobierno no respondió al llamamiento de la Iglesia de ampliar el plazo dado a las FARC.
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