Honrosas excepciones

Acostumbrados (con escasas y honrosas excepciones, como algunos de los que trabajan en la oficina de empleo de la ronda de Atocha) a funcionarios del "vuelva usted mañana" y el "está en su hora del café", que creen que ganar una oposición es obtener una patente de corso para descargar sus frustraciones en los incautos que se acercan sin la documentación en regla, es siempre un verdadero placer acudir a la Tesorería de la Seguridad Social de la calle de Agustín de Foxá de Madrid, sección de Artistas y Toreros.

Con exquisito trato y la sonrisa siempre puesta, resuelven todos los problemas que tu ignorancia pueda crear, haciéndote sentir que están a tu servicio (no al revés, como es habitual en la Administración Pública) y que eres un ciudadano con derechos y no un autista perdido en una novela de Kafka. Así que gracias a todos ellos por su maravilloso "talante" y, por favor, que cunda el ejemplo.