El PNV votará 'sí' a la Constitución europea porque no cierra la puerta al 'plan Ibarretxe'

La ejecutiva del PNV ratificará en su reunión del próximo lunes el documento elaborado por el grupo de trabajo de su comisión de exteriores en el que se defiende el apoyo a la Constitución europea. Entre los peneuvistas se ha impuesto su trayectoria europeísta y el "no dejar la bandera del sí en Euskadi al PP y al PSOE". Pero, sobre todo, han valorado que el tratado no cierra la puerta al plan Ibarretxe, ya que, en el marco de la "autonomía institucional" consagrada en el texto, son los Estados los que definen los "cambios de estatus interno" como el que reclama el plan del lehendakari. El texto ha sido elaborado por el presidente del PNV, Josu Jon Imaz, y Josu Erkoreka, su portavoz en el Congreso.

El documento que discutirá el lunes la ejecutiva hace una serie de consideraciones históricas recientes en las que se recuerda la postura del PNV en los principales hitos de la construcción europea. Así se repasa desde al apoyo peneuvista a la adhesión española a la Comunidad Económica Europea en 1986, pasando por los síes "cautos" a los Tratados de Maastricht, de Amsterdam y al Acta Única. En ese sentido, el PNV entiende que la actual Constitución es un paso más "en la dirección positiva", aunque como han repetido tanto Imaz como Juan José Ibarretxe, menos ambicioso de lo que desearían.

En el PNV ha pesado mucho su trayectoria europeísta y la doctrina pro europea definida en París por el lehendakari José Antonio Aguirre en 1949 ante el cuerpo diplomático. Hay que tener en cuenta que este partido y sus dirigentes han estado en los entresijos de la construcción europea desde el Movimiento Europeo, el Partido Popular Europeo, etcétera.

En la segunda parte del documento, se analiza de qué manera afecta el texto constitucional -que se votará el 20 de febrero en España- al plan estratégico del PNV para los próximos años: el plan Ibarretxe. En ese sentido, los redactores destacan que el reconocimiento por parte de la UE de la "autonomía institucional" "no cierra la puerta a un acuerdo interno con el Estado para cambiar el actual estatus, tal y como propone el lehendakari", según fuentes del grupo de trabajo. Es decir, el Tratado no impediría la modificación interna de relación con el Estado que dibuja el nuevo estatuto político vasco, según el PNV.

Además, los peneuvistas creen que el voto positivo contrarrestaría cualquier campaña cimentada en el supuesto alejamiento de Europa del PNV y de Euskadi del tipo "primero nos alejan de la UE con el plan Ibarretxe y ahora votando en contra de la Constitución".

Sobre el reconocimiento de las lenguas cooficiales de cada Estado, el PNV admite que no hay un reconocimiento formal que implique que se vaya a oficializar el uso del euskera en la UE. Pero reconoce avances y cree que hay un reconocimiento de valor simbólico que hace 20 años no existía. "Es un tema abierto, con toda la discusión sobre el reglamento del uso de las lenguas. No es un asunto cerrado", indican las mismas fuentes.

La tercera parte del documento está dedicada al análisis de coyuntura. El PNV cree que en Euskadi no se puede "dejar la bandera del sí al PP y al PSOE" porque "supondría una marginación" para el PNV. El partido descarta la abstención porque podría ser utilizada por sus adversarios para acusarles de "euroescépticos" y de ser "incapaces" de comprometerse con un proyecto territorial que trasciende a Euskadi.

El grupo de trabajo creado en el seno de la comisión de exteriores del partido se reunirá este viernes para cerrar algún fleco del borrador presentado el pasado lunes. Por ejemplo, para ampliar la parte dedicada en el dictamen a la Europa social y realizar correcciones de redacción. El documento final será previsiblemente aprobado en la reunión que mantendrá el próximo lunes 15 la ejecutiva del partido y ratificado en una Asamblea Nacional que será convocada de inmediato.