_
_
_
_
_
Entrevista:PETER BROWN, MICHAEL MORWOOD Y BERT ROBERTS | Autores del descubrimiento | 'EL HOMBRE DE FLORES'

"Las leyendas locales hablan de pequeños seres que vivieron casi hasta tiempos históricos"

El equipo editorial de la revista Nature ha entrevistado a tres de los descubridores de una nueva especie del género Homo en la isla de Flores. Los científicos son Peter Brown y Michael Morwood, de la Universidad de New England en Armidale (Australia), y Bert Roberts, de la Universidad de Wollongong, también australiana. Reproducimos aquí un extracto.

- ¿Cuál es la parte más interesante del hallazgo?

Peter Brown. Los aspectos relacionados con la biología y el comportamiento. Parece que estos pequeños homínidos son el resultado de un proceso de reducción de tamaño [dwarfing] endémico en la isla. Aunque ésta es una característica común de los grandes mamíferos en los entornos insulares, nunca se había registrado hasta ahora en los parientes del ser humano. Es una indicación clara de que los homínidos están sujetos a los mismos procesos biológicos que los demás mamíferos. Somos unos constructores de herramientas relativamente inteligentes, pero, aparte de eso, no somos especiales. En segundo lugar, la asociación de estos homínidos de cerebro pequeño con herramientas sofisticadas debería llevarnos a replantear nuestras ideas sobre la capacidad, complejidad social y de comportamiento de nuestros ancestros de cerebro pequeño [como los australopitecos], sobre todo si se confirma que el Homo floresiensis utilizó embarcaciones para llegar a Flores.

"Uno se pregunta cuántas especies humanas yacen aún ocultas en alguna cápsula del tiempo"
Más información
Hallada una especie humana de un metro de altura que vivió hace 18.000 años en Indonesia
El 'homo floresiensis' era un ser inteligente pese a su reducido cerebro

Michael Morwood. Algunas características del esqueleto parecen mucho más antiguas que los Homo erectus hallados en Java. A lo que más se parecen es a los restos encontrados en Dmanisi (Georgia), que datan de hace 1,8 millones de años. Por otro lado, los pequeños habitantes de Flores vivieron allí hasta tiempos recientes, solapando con los humanos modernos durante decenas de miles de años en la región. Documentar nuestra interacción con ellos es ahora una prioridad. Su complejidad de comportamiento -cacerías colectivas del elefante pigmeo Stegodon, uso del fuego, herramientas de piedra sofisticadas- es inesperada, dado su tamaño cerebral.

Bert Roberts. Hasta septiembre del año pasado no teníamos el menor indicio de que una especie humana totalmente nueva se extendió desde el extremo occidental hasta el extremo oriental de Asia hace entre uno y dos millones de años, y de que consiguió sobrevivir junto a los humanos modernos hasta casi tiempos históricos. Uno se pregunta cuántos fósiles de otras especies humanas yacen aún ocultos en alguna cápsula del tiempo subterránea, esperando pacientemente a que les descubran.

- ¿Puede compararse esto con cualquier otro descubrimiento de tiempos recientes?

P. B. La mayoría de los descubrimientos de homínidos en las últimas dos décadas podrían haberse predicho con lo que ya sabíamos. Encontrar restos de Homo erectus en Dmanisi, datados en 1,8 millones de años, fue inesperado, pero la anatomía de los fósiles no era sorprendente. Hasta el hallazgo de Flores, se creía que los homínidos de esa estatura y tamaño cerebral habían desaparecido hace 3 o 4 millones de años, sin salir de África.

M. M. No ha habido ningún descubrimiento comparable en el sureste asiático desde que Eugene DuBois halló los especímenes de Homo erectus en Trini, Java, en el siglo XIX.

B. R. Es extremadamente raro encontrar una especie humana desconocida que vivió en el pasado reciente. ¡En general, lo que suele tener impacto es el especimen más antiguo de una especie, no el más reciente! De hecho, los restos de nuestros parientes más recientes -los neandertales en Europa y los Homo erectus en Java- se descubrieron en el siglo XIX. Por tanto, la especie de Flores es el primer descubrimiento en más de un siglo de una nueva especie humana que coexistió con nosotros, el Homo sapiens.

P. ¿Cómo saben que lo que han encontrado no es simplemente un individuo excepcional?

P. B. En esta excavación recuperamos en 2003 restos de dos o tres individiduos, y el número ya ha ascendido a entre cinco y siete con los hallazgos de esta temporada. Queda por determinar si esta especie estaba restringida a la isla.

B. R. El más antiguo de los individuos de Flores vivió hace 95.000 años, y el más reciente, hace 13.000. La población de hobbits parece haber desaparecido al mismo tiempo que los elefantes pigmeos que cazaban, ambos aparentemente exterminados por una erupción volcánica ocurrida hace 12.000 años. Pero las leyendas locales hablan de unas criaturas parecidas a hobbits que sobrevivieron más al este de Asia casi hasta tiempos históricos.

M. M. Es casi seguro que aparecerán especies similares en otras partes del sureste asiático. Los principales candidatos son las islas de Sumbawa, Lombok, Timor y Sulawesi.

- ¿Se encontró el 'hombre de Flores' cara a cara con los humanos modernos?

P. B. Los humanos modernos ya habían alcanzado Australia hace 45.000 años, pero de momento no hay evidencias de que se solaparan en Flores. El Homo floresiensis estaba probablemente restringido a la selva tropical húmeda.

B. R. Hubo humanos modernos en los continentes asiático y australiano desde hace más de 40.000 años, a ambos lados de Flores. Borneo estaba unida al continente durante las glaciaciones. Debió haber más de 20.000 años de solapamiento entre las dos especies. Pero la evidencia directa más antigua de humanos modernos en Flores es de hace 11.000 años, inmediatamente encima de las cenizas volcánicas. Así que quizá se encontraron cara a cara y quizá no.

- ¿Cuál es el siguiente paso?

R. Encontrar al supuesto ancestro del Homo floresiensis, para confirmar si fue un proceso de reducción de tamaño. Hay herramientas de piedra de hace 840.000 años, pero no está asociado a esqueletos.

B. R. Exploraremos otras islas indonesias remotas en busca de otras especies extintas. Tal vez las islas indonesias han actuado como una serie de arcas de Noé independientes, cada una con sus propios enanos y gigantes. Sólo con nuevas excavaciones podremos encontrar nuevas sorpresas como ésta.

El profesor Chris Stringer, ayer al presentar en Londres un cráneo que se atribuye al <i>Homo floresiensis</i>.
El profesor Chris Stringer, ayer al presentar en Londres un cráneo que se atribuye al Homo floresiensis.AP

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_