El IV Encuentro Euromagrebí muestra un cine vital
Del retrato de una especie de "movida" argelina al de un pueblo de mujeres prostitutas, o a la historia de un niño en busca de su padre, las películas presentadas dentro del IV Encuentro Euromagrebí, celebrado esta semana simultáneamente en Madrid y Sevilla y organizado por el Círculo Mediterráneo, demuestran el nuevo impulso del cine realizado en los países del Magreb y del que apenas se conoce nada en España.
Se exhibieron Viva Argelia, película de Nadir Moknéche (al que llaman el Almodóvar argelino tras su primer largometraje, El harem de Madame Osmane); Los ojos secos, de la joven directora marroquí Narjiss Nejjar y Mil meses, del marroquí Faouzi Bansaïdi. Si Viva Argelia, coproducción franco-belga filmada en Argelia, narra la vida de tres mujeres en un país que se recupera de 15 años de terror islamista, en Los ojos secos, con dinero de Francia y Marruecos, se cuenta una historia inspirada en hechos reales sobre la vida de un pueblo convertido en prostíbulo.
