Zapatero culpa de la reducción del crecimiento a la carestía del petróleo por la guerra de Irak

Primera sesión de control al Gobierno del nuevo periodo de sesiones en el Congreso. El líder de la oposición, Mariano Rajoy (PP), la utilizó para preguntarle al presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, por el "inexorable empobrecimiento de España". Zapatero admitió que este año viviremos "una corrección ligera" de las metas previstas en materia de crecimiento económico, pero contraatacó imputándola a la subida del precio del petróleo y acusando indirectamente al PP porque, a su juicio, el alza en el coste del crudo "tiene mucho que ver con lo que ha pasado y pasa en Irak".

Para Zapatero, el encarecimiento del petróleo destaca "sobremanera" entre los "factores externos" a los que atribuyó la ligera corrección a la baja que se ha hecho sobre el 3% de crecimiento previsto inicialmente para este año al 2,8% calculado posteriormente.

La pregunta de Rajoy, de apariencia económica, estaba cargada de intenciones políticas y Zapatero no esperó a la réplica para dejarlo de manifiesto. En su primera respuesta, el presidente del Gobierno se apresuró a recordar, sin citarlos, que miembros del Gobierno y del PP "dijeron aquí, al inicio de la guerra de Irak, que iba a bajar el precio del petróleo y que España iba a tener grandes beneficios. Lamento que no haya sido así".

Para Zapatero, "la inversión en la guerra que algunos propusieron no produce más que efectos negativos", y anunció que el Gobierno invertirá en "investigación, educación, becas e infraestructuras para mejorar la economía". Rajoy le replicó que el Gobierno del PP les dejó "una muy buena herencia económica" y que hoy "las cosas ya no están tan bien" porque la inflación es del 3%, con lo que ha aumentado el diferencial con el resto de Europa, "donde también utilizan el petróleo", ironizó el líder del PP. Además, le dijo a Zapatero que el crecimiento ha roto la tendencia al alza, que "antes era del 2% con respecto a Europa y ahora es del 0,6", y volvió a recordarle que "allí también utilizan petróleo".

Luego, acusó a Zapatero de tancredismo, de no haber tomado una sola medida económica y de comportarse "tan mudo y tan indiferente como cuando pretende ocultar a los españoles lo que ha ocurrido entre el 11 y el 14 de marzo". Era una mención clara a la irritación que por la mañana había mostrado el PP en relación con las comparecencias que solicitó en la comisión del 11-M y que fueron denegadas.

Zapatero contraatacó recordándole que "del 11 al 14 de marzo" -fechas de los atentados islamistas y de las elecciones generales, respectivamente- "gobernaba en este país el Partido Popular, y por tanto esa es la responsabilidad que tienen que asumir de alguna manera". El mensaje final fue de optimismo político y económico. "Lo único inexorable es el pasado; el pasado es suyo, y el futuro es hoy mejor que hace seis meses", le dijo a Rajoy.

Un poco antes, el presidente del Gobierno dio seguridades al portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, de que el Gobierno ya está negociando con asociaciones de trabajadores autónomos para mejorar su situación, especialmente en lo que respecta al seguro de desempleo, que ahora no cobran.

- El modelo autonómico. La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró al secretario general adjunto del PP, Ángel Acebes, que el Gobierno "cree en el Estado autonómico" y que no "existe un problema de convivencia territorial", por lo que recomendó al dirigente popular que no confunda "la realidad con sus miedos". Acebes acusó al Gobierno de ser "un desbarajuste de contradicciones" y le recordó que el titular de Administraciones Públicas ha hablado de derecho de veto en el Senado para las comunidades autónomas y, sobre todo, las declaraciones de presidentes de comunidades autónomas y alcaldes socialistas que han hablado de "pillaje absoluto" o de "empezar la casa por el tejado", en referencia al presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y al alcalde de A Coruña, Francisco Vázquez.

- Estudios universitarios de etarras.La diputada popular Ana Torme mostró su inquietud al ministro del Interior, José Antonio Alonso, porque teme que los presos de ETA recuperen privilegios al poder, de nuevo, matricularse en la Universidad del País Vasco. El ministro le recordó que los presos de ETA tienen que estudiar en la UNED, salvo que demanden enseñanzas que no ofrezca esa universidad. Alonso anunció que el Gobierno firmará un convenio con la Conferencia de Rectores, que "tendrá continuidad con las diferentes universidades", y le aseguró que todo se hará "con las garantías precisas para que quede completamente a salvo la seguridad de los profesores, el rigor y el control de la docencia y la discencia, y para evitar cualquier coacción o situación de fraude".