La sanidad valenciana es la más morosa en el pago a proveedores

La sanidad valenciana sigue siendo la que más tarda en pagar a sus proveedores. El último informe de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) sitúa a la administración valenciana en el primer lugar de la lista de morosos con un retraso de 550 días en el pago a 31 de mayo. La deuda total que arrastra la consejería es de 476 millones de euros, la segunda más alta tras Andalucía.

Fenin representa a más de 500 empresas de fabricantes, importadores o distribuidores de productos sanitarios que tienen como cliente, en la mayoría de los casos principal, a las administraciones sanitarias. En su último informe, con datos actualizados a fecha de 31 de mayo, esta organización ha vuelto a situar en la cabeza del retraso en el pago a la Consejería de Sanidad. Las arcas públicas valencianas, gestionadas por el consejero de Economía y Hacienda, Gerardo Camps, tardan una media de 550 días en saldar las deudas que contrae con estas empresas, frente al retraso medio de los servicios de salud del resto de autonomías, que se sitúa en los 323 días; es decir, casi un año más.

Los 550 días son una cifra inferior al plazo de 608 días que tardaba Sanidad en pagar según el anterior informe de Fenin, elaborado con información del 31 de diciembre del año pasado. Sin embargo, esta diferencia no supone que se haya registrado una mejora sustancial en la liquidez de la consejería ni en el descenso de la deuda. Como apuntaba ayer la responsable de Fenin, Margarita Alfonsel, la reducción del tiempo de pago se debe a la liquidación que hizo la Generalitat en el mes de marzo correspondiente a impagados del año pasado, pero fundamentalmente de los años 2000 y 2001, "lo que acortó el retraso medio en el pago, porque se trataba de deuda antigua".

La suma total pendiente de pago, sin embargo ha crecido. De los 450 millones de euros que se adeudaban a finales del año pasado, se había pasado a 476 millones a 31 de mayo. Por delante sólo está Andalucía con 611 millones -y un mayor volumen de compra-.

La entidad que agrupa a medio millar de empresas comentó ayer por boca de Alfonsel que se mantienen conversaciones con responsables económicos de la Consejería de Sanidad para "buscar instrumentos para corregir el déficit" existente, aunque "aún no se ha planteado ninguna solución sobre la que discutir". Alfonsel manifestó que cualquier salida "debe ser estudiada en el seno de Fenin" y subrayó que, en el caso en que se planteara la posibilidad de llegar a alguna fórmula de acuerdo "nunca implicaría renunciar a los intereses" generados por la deuda. En total, desde que en 1996 comenzaran a llevar a los tribunales los retrasos de las distintas administraciones sanitarias, Fenin ha recaudado 300 millones de euros por intereses de demora.

Las reclamaciones por parte de las empresas que sirven sus productos a la consejería no se limitan a las planteadas por Fenin. Los laboratorios farmacéuticos, integrados en la asociación Farmafluid, llegaron a plantear a principios de año dejar de servir sus productos si se mantenía el retraso en el pago. Primero aplazaron la amenaza hasta después de las elecciones generales de marzo. Más tarde la retiraron definitivamente ante las exigencias de la Consejería de Sanidad. "No se puede negociar con una asociación que tiene una amenaza en firme contra la consejería", comentaron emtonces desde ese departamento, además de señalar que era una cuestión "incumplible, ya que no se puede dejar sin medicamentos a los hospitales".

Fenin mostró ayer su confianza en que la aprobación del anteproyecto de Ley contra la Morosidad Comercial por el Consejo de Ministros evite el actual endeudamiento de las administraciones públicas. La ley fijará el plazo máximo de pago de las compras en 60 días.