La revolución flamenca de Paco de Lucía

El Príncipe de Asturias de las Artes consagra a Paco de Lucía (Algeciras, Cádiz, 1947) como el músico flamenco de mayor proyección internacional, al entrar en la lista de los 13 artistas del ámbito de la música que han recibido este galardón en siete de sus 24 ediciones. "Es un reconocimiento oficial para una música maltratada", declaró el guitarrista a Europa Press ayer por la mañana en Jimena de la Frontera (Cádiz), "porque el flamenco no está reconocido", y eso "añade valor al premio". "Es un reconocimiento a la cultura de Andalucía, de mi tierra, y sobre todo del flamenco, que es por el que llevo dejándome la piel toda la vida". "Me siento muy orgulloso del premio por mi familia porque, cuando era pequeño, mi padre me compró una guitarra como último recurso para subsistir, porque estábamos hambrientos", dijo De Lucía, quien aseguró que el premio de las Artes no va a cambiar nada su vida, "sólo voy a viajar más contento",

"Es uno de los grandes en la historia de la música española", afirma Enrique Morente

"Mi padre me compró una guitarra como último recurso para subsistir, porque estábamos hambrientos"

"Me lo dijeron antes de salir a tocar anoche [el martes] y me puse muy nervioso porque antes de actuar estoy concentrado, tratando de equilibrarme, y me pusieron nervioso". Así describía ayer por la tarde en Málaga Paco de Lucía el momento en el que le comunicaron que era el premio Príncipe de Asturias de las Artes de este año. El galardón le llegaba en medio de la gira de su disco Cositas buenas, justo antes de actuar en el Festival de Jimena de la Frontera (Cádiz). "Sonó el teléfono cien veces en un minuto. Entraron en el camerino 40 personas a darme un abrazo y ya tenía que salir a tocar. Fue el peor momento, la verdad, pero bienvenido sea". Parco en palabras, el guitarrista trataba ayer de asimilar la expectación que ha creado el premio, antes de coger un vuelo en Málaga con destino a Barcelona. Vestido con pantalón y camisa blanca holgados, ataviado con una gorra azul, se sorprendía del revuelo de fotógrafos y periodistas y se apartaba un momento de su equipo, formado por unas 12 personas, para responder a unas preguntas. "Todavía no me he calmado. Terminé de tocar a la una y pico y en el camerino había mucha gente. Me acosté a las cinco de la mañana y cuando me he despertado ya había un montón de periodistas en la puerta del hotel". Esta noche actúa en la localidad francesa de Perpiñán.

Contó que la concesión le ha hecho "mucha ilusión" y que lo recibirá en nombre del mundo del flamenco. "Es una música que tiene muchísimo valor, más de lo que se cree la gente, y esto es un pasito más adelante para que lo consigamos". Un lenguaje "que tiene mucha fuerza y que la gente debería oír más y dejarse de prejuicios", aconseja.

Tímido, reconoce que le da vergüenza que le den premios, y que está muy contento y muy orgulloso por su familia, hijos, amigos y toda la gente que le quiere. "La felicitación que más hondo me ha llegado ha sido la de mi hija Casilda, que escribe en una revista, muy bien además", contaba emocionado, "me ha dicho que está muy orgullosa de ser mi hija y eso... me ha llegado al alma".

Paco de Lucía tuvo un recuerdo especial para Camarón de la Isla. "Esto es extensible para él, porque él forma parte del carro en el que vamos todos".

Francisco Sánchez Gómez, Paco de Lucía, versátil e innovador, a quien se atribuye haber incorporado al lenguaje de la guitarra flamenca nuevos acordes y contratiempos rítmicos, mereció el Príncipe de Asturias de las Artes, según el acta del jurado, por haber "trascendido fronteras y estilos" hasta convertirse en "un músico de dimensión universal". El fallo argumenta que Paco de Lucía, "a partir de la guitarra flamenca, ha profundizado también en el repertorio clásico español -de Albéniz a Falla-, en la emoción de la bossa nova y el sentimiento del jazz". "Todo cuanto puede expresar con las seis cuerdas de la guitarra", afirma el jurado, "está en sus manos, que se animan con la emocionante hondura de la sensibilidad y la limpieza de la máxima honradez interpretativa".

La candidatura de Paco de Lucía a este galardón, dotado con 50.000 euros y una escultura de Joan Miró, fue propuesta por el cantante Alejandro Sanz, el abogado Antonio Garrigues Walker; la presidenta de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), Ana Diosdado; el presidente de la Sociedad de Artistas Españoles (AIE), de la Federación Iberolatinoamericana de Artistas (FILAIE) y del Grupo Europeo de Artistas (GIART), Luis Cobos, y el alcalde de Algeciras, Juan Antonio Palacios. De las 39 propuestas procedentes de 18 países, otras dos llegaron, con la de Paco de Lucía, al tramo final de las deliberaciones del jurado: el coreógrafo francés Maurice Béjart y el cineasta Ingmar Bergman.

"Si estoy en la música es por lo que me maravilla Paco de Lucía", declaró ayer Alejandro Sanz, informa J. J. Mateo. "Con siete años cayó en mis manos un disco suyo y allí empezó un poco todo. Es un genio y que le den el premio demuestra que el jurado ha sabido reconocer su genialidad. No se han dejado llevar por la lustrosidad de los nombres del resto de nominados y por fin se han acordado del flamenco".

Paco de Lucía, que en octubre acudirá a Oviedo para recibir el premio de manos de Felipe de Borbón, lleva desde la infancia sobre los escenarios; a los 16 años realizó su primera gira por el extranjero y con Camarón de la Isla, con quien grabó una decena de discos, constituyó una pareja artística de extraordinario éxito. De Lucía, dotado de genio creativo y maestría interpretativa, y considerado un perfeccionista que logró arrancar sonidos inéditos a la guitarra, al extremo de revolucionar el concepto tradicional del flamenco, ha creado escuela entre las generaciones de intérpretes más jóvenes.

El mundo del flamenco se rindió ayer ante el Príncipe de Asturias a Paco de Lucía. El cantaor Enrique Morente dijo que le ha sido concedido "no sólo por la calidad extraordinaria de su arte, sino por su comportamiento personal". En declaraciones a Efe, Morente subrayó la honestidad personal y profesional del guitarrista, al que considera "uno de los grandes en la historia de la música española". Para la cantaora Carmen Linares, De Lucía es un artista "innovador y rompedor, pero siempre desde el respeto a la tradición", y para el también guitarrista Tomatito Paco de Lucía "ha abierto las puertas del mundo de la guitarra y del flamenco al mundo entero"."Gracias a él estamos nosotros", dijo Tomatito. La bailaora Sara Baras señaló: "Es un ejemplo para todos nosotros". "Cuando vas por todo el mundo te das cuenta de lo que Paco ha hecho", por ello es "un premio muy importante para todo el flamenco".

Los Reyes y los Príncipes de Asturias felicitaron por telegrama a Paco de Lucía. La ministra de Cultura, Carmen Calvo, le definió como "una de las pocas personas a las que se les puede poner la palabra genio"

Juan Cruz, miembro del jurado, sostuvo que "el Premio Príncipe de Asturias ha buscado siempre el equilibrio entre lo internacional y lo nacional, y esta vez ha logrado el punto sobresaliente porque no hay un español tan internacional, no sólo en conocimiento, sino en dedicación, como Paco de Lucía porque combina el jazz, el flamenco, la bossa nova y la música clásica. Es como si se hubiera premiado a Debussy y a Thelonius Monk". Fernando Delgado, también jurado, opinó que "Paco de Lucía es un intérprete extraordinario, pero también destaca en la composición, por lo que es el músico total". José Luis Garci señaló que el guitarrista es "uno de lo maestros más grandes" de la guitarra española.