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La Feria del Libro logra casi 10 millones en ventas, un 7,5% más que en 2003

Los números han confirmado la intuición. Ayer, mientras se desmantelaban poco a poco las 377 casetas que ocuparon el parque del Retiro hasta el pasado domingo, Antonio Albarrán, director saliente de la Feria del Libro de Madrid, anunció las cifras de la 63ª edición: 3.200.000 visitas ("más o menos las del año pasado"), "casi un millón de consultas" a la página web y ventas por 9.780.000 euros, que equivalen a "un 7,5% más que en 2003". A las conclusiones se sumó un anuncio: el lema para la edición de 2005 girará en torno a los jóvenes y los libros.

Acompañado por Purificación Prieto, presidenta de la Feria, y por Teodoro Sacristán, nuevo director, Antonio Albarrán reconoció que "este año la feria empezó mejor: el primer fin de semana fue muy bueno; después, las ventas bajaron". Con todo, se mostraron satisfechos: "Estamos contentos. Sin alharacas, pero moderadamente contentos", resumió Purificación Prieto.

Los medios electrónicos de pago han sido aliados de los libreros. "Es muy difícil saber exactamente por qué se vende más, pero la facilidad de poder pagar con medios electrónicos incide, porque en la feria muchos libros se compran por impulso, sin tener el dinero encima", explicó Albarrán.

Los organizadores destacaron el acierto del eje temático elegido para este año, Europa se construye con libros: "Queríamos que sobre Europa se proyectara una imagen cultural y creemos haberlo logrado. Debajo de Europa hay más que intercambio comercial: hay 455 millones de ciudadanos, 25 países y más de 25 culturas". Una apuesta que editores, autores y traductores han buscado reafirmar con la publicación de Europa en cuentos y algún poema, una recopilación de textos de 28 países que se ha repartido de forma gratuita entre los visitantes.

Espíritu europeo

El espíritu europeo se reflejó también en los intelectuales que participaron en mesas redondas, debates y presentaciones: Jorge Semprún, Graham Swift, Peter Sloterdijk, Martin Amis y José Saramago, entre otros. La relación entre lectores y autores mereció un renglón aparte: miles de lectores se acercaron a las casetas instaladas en el paseo de Coches y las firmas superaron las 2.000.

También se difundió ayer una encuesta realizada entre los expositores de la Feria. El 80,7% de ellos considera que la feria es "un acto de promoción cultural"; el 65%, que es "cuestión de tradición"; el 57,8% siente que es un "encuentro entre el lector y los autores" y el 56,8%, que tiene "un interés comercial". Al comentar estos datos, el nuevo director, Teodoro Sacristán, sostuvo la necesidad de "destacar la dimensión cultural de la Feria de Madrid, valorada por el 80% de los consultados".

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