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Solbes eleva dos décimas el déficit del Estado hasta 2007 por ajustes contables

El ministro explica la revisión de las cifras que elaboró el PP por una "mayor transparencia"

Lucía Abellán

La Administración central del Estado registrará dos décimas más de déficit de lo que previó el anterior Gobierno del PP entre 2005 y 2007. El nuevo pronóstico obedece a una "mayor transparencia" en la contabilidad del Estado, según el vicepresidente y ministro de Economía, Pedro Solbes. Pese al empeoramiento en las expectativas del Estado y las comunidades, las cuentas finales de todas las administraciones públicas siguen arrojando superávit, debido principalmente a la bonanza de la Seguridad Social, que el Ejecutivo ha revisado al alza. Así se mantiene el superávit previsto para 2005 y 2006 y se eleva una décima el de 2007.

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Las cuentas del Estado para los próximos tres años mantendrán el superávit presupuestario fijado por el anterior Gobierno del PP. Sin embargo, habrá diferencias fundamentales en sus componentes. La primera de ellas reside en el volumen de déficit del Estado. Frente a una previsión del 0,3% del PIB para 2005, el nuevo Gobierno contempla dos décimas más, la misma proporción que aumentan los déficit de 2006 y 2007. "El Estado no gasta más, sino que contabiliza mejor", explicó ayer el ministro de Economía, Pedro Solbes, en su primera comparecencia tras la reunión del Consejo de Ministros.

Este afloramiento de déficit obedece, según el ministro, a una mejor contabilización de las cuentas públicas. Se trata de aplicar los criterios de Contabilidad Nacional (registra los gastos cuando se comprometen) al Presupuesto. Así, por ejemplo, la compra de una fragata militar se incluirá en el Presupuesto del año en que se decide adquirirla, en lugar de dividir su coste en diferentes ejercicios e imputar una parte a cada uno. Cambios de este tipo explican ese mayor déficit, según el Ministerio de Economía.

Más desequilibrio

Solbes quiso ahuyentar la idea de que el déficit habría sido menor con el Gobierno del Partido Popular mediante el siguiente análisis: si el anterior Ejecutivo hubiera empleado los criterios de contabilidad aplicados por el actual, el Estado habría duplicado su déficit este año (desde el 0,4% hasta el 0,8%).

Pese a este vaticinio, Solbes no quiso dar una cifra cerrada del déficit esperado para 2004. Y es que a ese 0,8% resultante de las mejoras técnicas habría que añadirle otras partidas inesperadas, como la deuda del Estado con Andalucía (2.500 millones de euros), que se asumirá este año. Hace varias semanas, el secretario de Estado de Hacienda aseguró que ese pago a Andalucía más el reflejo del déficit de Radio Televisión Española a que obliga la Unión Europea acercarían el déficit del Estado (sin Seguridad Social) al 1% del PIB.

Las nuevas previsiones presentadas ayer por Solbes conforman el objetivo de estabilidad presupuestaria que aprobó ayer el Consejo de Ministros. La Ley de Estabilidad Prespuestaria -vela por el equilibrio de las cuentas públicas- obliga al Ejecutivo a presentar esas cifras en Bruselas con una perspectiva de tres años.

Además de la Administración central, también las comunidades autónomas registrarán más déficit del previsto. Frente al equilibrio fijado por el Ejecutivo anterior hasta 2007, el Gobierno establece una décima de déficit para 2005 y 2006. El equilibrio se lograría en 2007. En este caso, el Gobierno ha decidido empeorar la previsión a la vista de las cuentas que presentaron hace dos semanas las administraciones regionales al Gobierno central. Cataluña, Galicia y Baleares registran números rojos, por lo que, pese a que la Ley de Estabilidad obliga a todas las administraciones, es más realista reflejar un pequeño déficit para los próximos años. En las corporaciones locales sí se contempla un horizonte de equilibrio en los tres años.

El hecho de que se mantenga (incluso se mejore en 2007) el superávit presupuestario previsto responde a la Seguridad Social, a la que el Gobierno actual augura una evolución aún mejor que el anterior. Las previsiones del PP situaban este avance en el 0,4% cada año y las actuales lo elevan al 0,7%. Es decir, se trasladan tres décimas a la Seguridad Social, cuya aportación ha ido creciendo año tras año y permite compensar (sólo a efectos contables) el mayor déficit del Estado y las administraciones territoriales. De esa forma, en 2005 y 2006 se mantiene el excedente esperado (0,1% y 0,2%, respectivamente). Para 2007 se espera una mejora de una décima respecto a lo previsto (0,4% frente al 0,3%). Este optimismo respecto a la evolución de la Seguridad Social deriva de lo observado en los últimos años, según Economía. El fuerte ritmo de creación de empleo ha provocado que desde 1999 los resultados de la Seguridad Social superen con creces lo presupuestado.

Junto al objetivo de estabilidad presupuestaria, el Consejo de Ministros aprobó ayer también el techo de gasto para el Presupuesto de 2005, es decir, la cantidad máxima que el Gobierno podrá gastar, determinada por el volumen de ingresos. Ese tope ha quedado fijado en 124.525,76 millones de euros, un 6,2% más que lo presupuestado en 2004.

Horarios comerciales

Respecto a los planes del Gobierno de modificar los horarios comerciales (con diferentes criterios entre Solbes y el ministro de Industria, José Montilla), el vicepresidente aseguró que los 12 domingos de apertura que autoriza la actual legislación "es una realidad que no plantea problemas". Solbes reconoció que el programa electoral socialista recoge un mínimo de ocho domingos -tesis que defiende Montilla- y aseguró estar conversando con él y con otros miembros del Gabinete para alcanzar un acuerdo "que satisfaga el interés de los ciudadanos".

Pedro Solbes, durante la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.

/ M. ESCALERA
Pedro Solbes, durante la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros. / M. ESCALERA

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Sobre la firma

Lucía Abellán
La redactora jefa de Internacional de EL PAÍS ha desarrollado casi toda su carrera profesional en este diario. Comenzó en 1999 en la sección de Economía, donde se especializó en mercado laboral y fiscalidad. Entre 2012 y 2018 fue corresponsal en Bruselas y posteriormente corresponsal diplomática adscrita a la sección de España.

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