Zapatero: "Bush sabrá lo que tiene que hacer con las torturas en Irak"

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirma en una entrevista que publica hoy el diario estadounidense The New York Times que jamás enviará tropas españolas a Irak, aunque estuvieran bajo la autoridad de la ONU o de la OTAN. En cuanto a las torturas de presos iraquíes a manos de estadounidenses, Zapatero afirma: "El presidente Bush sabrá lo que tiene que hacer".

Zapatero considera "más bien improbable, utópico" que se pueda crear una fuerza que actúe bajo la autoridad de la ONU y entiende que no se puede reproducir el modelo aliado de Afganistán, sino que apuesta por unas fuerzas árabes "que podrían ayudar a que haya tranquilidad en Irak". Ahora mismo, España sólo considera, dice, la posibilidad de ampliar el contingente de 125 hombres en Afganistán o enviar tropas a Haití. Con la retirada rápida de los 1.400 soldados en lugar de esperar al 30 de junio, dice Zapatero a Elaine Sciolino, corresponsal europea del diario, "no hemos engañado a nadie; para evitar cualquier incertidumbre para las tropas o los aliados, tomé rápidamente la decisión". Desde el día de las elecciones, añade, sus dos hijas le preguntaban cada noche: "Papi, ¿cuándo vas a traer a los soldados?"

Cuando la periodista le pregunta a Zapatero por la reacción del secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, al conocer la rápida retirada de las tropas -"una decisión que refleja cobardía y apaciguamiento de los terroristas", son las palabras que la periodista pone en boca del jefe del Pentágono- el presidente del Gobierno dice: "Ya sabemos que los ministros de Defensa tienden a tener fuertes personalidades. Forma parte del trabajo".

Tensa conversación

Zapatero habla también de la tensa conversación telefónica que mantuvo con Bush cuando le llamó para decirle que los soldados se iban. El presidente de EE UU condenó sin paliativos la decisión y dijo que "la situación era muy difícil en Irak". "Me dijo que estaba decepcionado. Expresó su opinión y yo la mía y lo último que me dijo fue: 'gracias por llamar".

El presidente del Gobierno dice que está deseando conocer personalmente a George W. Bush, aunque admite que la Casa Blanca no le ha invitado a venir a Washington. Dice que le diría "la verdad" si se viera con él y bromea, según la periodista, al hablar de su victoria y de las elecciones estadounidenses: "Incluso estaría dispuesto a darle mi opinión sobre las elecciones de noviembre, si la quisiera saber". Zapatero no quiere opinar más sobre la cita electoral de EE UU, pero cree que "es obvio que el resultado electoral español necesariamente tiene que tener un impacto". Zapatero añade que guarda muy buen recuerdo de cuando viajó por primera vez a EE UU, en 1990, invitado por el Departamento de Estado, que conserva la amistad de muchas personas a las que conoció y que admira las ideas de Thomas Jefferson.

Sobre el escándalo de los malos tratos y torturas de presos iraquíes a manos de soldados estadounidenses prefiere no opinar: "Quiero ser extremadamente respetuoso de los asuntos internos de un país que es un aliado; el presidente Bush sabrá lo que tiene que hacer".

Zapatero declara después que confía en construir una relación de confianza con el primer ministro británico, Tony Blair, del que dice que es "un buen demócrata". "Cuando le veía en los dos últimos años le decía: 'Tony, ya sabes que voy a derrotar a estos amigos tuyos [en referencia al Gobierno de Aznar]'. Y él me miraba con aire incrédulo. Por supuesto, cuando le vi después de las elecciones, le dije; '¿Lo ves, Tony?' Y él me contestó: 'Bueno, la verdad es que siempre me has gustado".

En un plano más personal, Zapatero se define como un "feminista radical". Y dice que no le molesta tener apodos como Bambi o críticas de que es un ingenuo y sonríe demasiado: "Probablemente parezca un ingenuo a mucha gente, pero no creo que haya nada malo en que lo piensen".