Álvarez-Cascos elude dar detalles sobre las compras de obras de arte realizadas por el Ministerio de Fomento

Habían citado a los medios de comunicación para dar cuenta de las inversiones en patrimonio cultural, pero el plan quedó algo deslucido. Francisco Álvarez-Cascos, ministro de Fomento, y Pilar del Castillo, de Educación y Cultura, entraron a la sala del ministerio que dirige el primero, decorada con nueve cuadros de Pelayo Ortega, pintor que trabaja con la galería Malborough, dirigida por la actual pareja de Cascos, María Porto, con 15 minutos de retraso sobre lo previsto, para dar cuenta de las inversiones del 1% cultural, que es el porcentaje al que la ley obliga a dicho ministerio para rehabilitar patrimonio.

Empezó la invitada: "Estoy encantada de estar en esta sala rodeada de cuadros de un buen amigo mío y gran caminante, Pelayo Ortega, con quien hice la Ruta del Cares en los Picos de Europa", recordó Del Castillo. Luego siguió una explicación de 45 minutos sobre las inversiones en todas las comunidades autónomas a partir de unos papeles que se habían entregado antes y en los que se da cuenta de que, entre 1996 y 2004, se han realizado obras en torno al patrimonio por valor de 249 millones de euros.

Pero nadie quiso preguntar sobre las explicaciones que se acababan de dar, que, según Cascos, fueron "exhaustivas y difíciles de resumir". Levantaron más interés los cuadros de Pelayo Ortega. ¿Qué criterios se han seguido para comprarlos? "Los mismos que se siguen desde hace 20 años", respondió Cascos. ¿Cuáles? "Los mismos que se siguen desde hace 20 años", repitió. ¿Las obras encargadas a Manuel Valdés, de la galería Malborough, para aeropuertos y lugares públicos se han hecho con cargo al 1% cultural? "El 1% cultural es para obras en un entorno determinado, esas que menciona han salido de otro presupuesto para comprar obras de arte antiguas y contemporáneas", siguió Cascos.

Del Castillo terció: "La verdad es que me produce perplejidad el escaso interés que ha levantado en ustedes la exposición amplia e importante que les hemos ofrecido el señor ministro y yo. Cuando lo haces y a continuación escuchas este tipo de preguntas la verdad es que produce una extraordinaria perplejidad", zanjó la ministra.