La OMS lanza contra el sida la mayor campaña sanitaria de la historia

La Organización Mundial de la Salud (OMS) dio ayer, Día Mundial de la Lucha contra el Sida, el pistoletazo de salida para la mayor campaña sanitaria de su historia. El objetivo es que en 2005 tres millones de personas de países pobres disfruten de tratamientos antivirales. Actualmente, apenas 350.000 de los 38 millones de infectados que viven en las zonas menos desarrolladas tienen acceso a los medicamentos. El plan, llamado 3 por 5, requiere una financiación de 5.500 millones de dólares (unos 4.700 millones de euros), y prevé llegar a los 50 países más afectados.

No todas las personas que viven con VIH requieren tratamiento antiviral de inmediato. El propósito de la OMS es llegar a aquellas más necesitadas, en las que las infecciones oportunistas (malaria, tuberculosis, diarreas) ya han comenzado a hacer mella. Al dar medicación a tres millones de enfermos la organización pretende frenar la expansión de la epidemia, y evitar la crisis social y económica que amenaza al África subsahariana, el sureste asiático y los países de Europa oriental, las tres regiones con más incidencia de la infección.

Una ayuda clave al plan de la OMS son las rebajas en los precios de los medicamentos. Un tratamiento contra el sida cuesta en los países ricos unos 10.000 euros al año. La organización espera conseguir, mediante acuerdos con los fabricantes o la utilización de genéricos, conseguir el cóctel a 450 dólares (380 euros) por persona este año, y que el precio en diciembre de 2005 sea de 250 dólares (212 euros).

Parte de la política de medicamentos radica en concentrar los esfuerzos en una combinación de tres fármacos (lamivudina, estavudina y nevirapina) que se pueden suministrar en una sola pastilla. Con ello se facilita el reparto y que los enfermos tomen todas las dosis.

Para que el plan tenga un efecto permanente, una parte importante del presupuesto del proyecto se va a dedicar a formar personal preparado en controlar el suministro de medicinas. El objetivo es que en junio del año que viene ya haya 10.000 auxiliares entrenados. Al final de 2005 se calcula que harán falta 100.000.

Estos trabajadores tendrán otros cometidos, como asesorar sobre las prácticas seguras para evitar la transmisión del virus y aconsejar sobre el momento para hacerse la prueba del sida. La ventaja de la formación es que dejará equipos preparados en los países, que podrán continuar su labor cuando el plazo del plan acabe.

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La OMS confía en que al tener acceso a los medicamentos, más personas se decidan a analizarse. "También sabemos que la disponibilidad de tratamiento reduce el estigma de las personas que viven con el sida. Éstas tienen derecho al tratamiento y debemos encontrar la manera de ofrecerlo", ha dicho Paulo Teixeira, director de VIH/sida de la OMS.

Además de la formación de personal, la OMS cuenta con la colaboración de ONG que ya trabajan en las zonas afectadas. Al final del proyecto, la organización calcula que habrá unas 200 asociaciones implicadas.

Hasta la fecha, 20 países ya han pedido participar en el plan de la OMS. Como adelanto, la organización sanitaria ha enviado equipos de investigación y consultores a Kenia, Burkina Faso, Malaui y Zambia.

El plan 3 por 5 es uno más dentro de las iniciativas internacionales para frenar la expansión del sida en el mundo, por lo que requiere una financiación especial. Ello quiere decir que no va a sustituir otras iniciativas actualmente en marcha, como el Fondo Global contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria de la ONU.

El problema del plan de la OMS es la financiación. España ya ha comprometido la entrega de 50 millones de dólares (42,2 millones de euros) para el fondo de la ONU entre 2003 y 2004. Sanidad ha anunciado la entrega de 500.000 euros para la nueva campaña.