Al Sida, ponle un cero

Por segundo año consecutivo la Organización Mundial de la Salud ha decidido dedicar este 1 de diciembre, Día Mundial del Sida, a la lucha contra la estigmatización de los afectados por esta enfermedad. Bajo el lema Vive y deja vivir celebramos un Día Mundial del Sida que invita un año más a la reflexión acerca de la enfermedad no sólo desde el punto de vista epidemiológico, terapéutico o diagnóstico, sino desde un punto de vista más social, el de la discriminación a la que los afectados se ven sometidos y cómo este estigma influye en la calidad de vida de los enfermos, ya que la discriminación sólo nos conduce a dificultar tanto la prevención como el acceso al tratamiento.

El hecho de que por segundo año dediquemos el Día Mundial del Sida a fomentar precisamente la reflexión sobre esta faceta, debería ayudarnos a todos a desterrar los antiguos prejuicios que han rodeado desde los años ochenta a esta enfermedad. En ocasiones, parece que la visión que desde la sociedad tenemos del Sida no ha evolucionado al mismo ritmo que su detección precoz, su prevención y sobre todo, su tratamiento.

Desde el Gobierno de la Generalitat Valenciana estamos trabajando en varias líneas: la prevención de la enfermedad tanto en la población en general como en aquellos colectivos con prácticas de riesgo; y en la mejora de la atención al paciente, tanto en su tratamiento como en el apoyo en su vida diaria.

Este claro compromiso con el control de la epidemia que surgió en los años 80 y fue incrementando su incidencia de forma imparable hasta casi la mitad de los 90, se pone de manifiesto en las Políticas Sanitarias que ha elaborado la Consejería de Sanidad así como la incorporación al Plan de Salud 2001-2004, donde se recogen las líneas estratégicas de la sanidad pública en relación a las enfermedades prevalentes entre la población de la Comunidad Valenciana, la lucha contra el Sida como uno de los macro objetivos del Plan.

Desde el punto de vista de la prevención, la Consejería de Sanidad ha llevado a cabo programas específicos de educación sexual entre los jóvenes en edad escolar y también entre el profesorado; se ha incrementado en un 25% la atención de los usuarios atendidos en los programas de intercambio de jeringuillas; se realiza al todas las embarazadas de la Comunidad Valenciana el test del VIH durante el primer trimestre del embarazo y las actividades informativas de los centros de salud pública de la conselleria de Sanidad van incrementado en un 25% su volumen de actividad relacionada con la información del Sida cada año.

Asimismo, la Consejería de Sanidad dispone de unos Centros de Información y Prevención del Sida (CIPS) en cada una de las provincias con un número de teléfono gratuito.

Por lo que respecta a la mejora de la calidad en la atención al paciente, la Consejería de Sanidad trabaja para dotar a todos los hospitales de la red pública valenciana de unidades de atención farmacéutica, que nos prestan un gran ayuda en el seguimiento de los tratamientos por parte de los enfermos. En este sentido, hay que señalar que las terapias antirretrovirales han demostrado en los últimos años una importante eficacia en el tratamiento contra la enfermedad, por lo que desde las administraciones debemos centrar nuestros esfuerzos en asegurarnos de que los afectados cumplan los tratamientos prescritos en un nivel adecuado de adherencia e interviniendo para evitar la aparición de resistencias a estos fármacos.

En este seguimiento del paciente nos ayudan las unidades de pacientes externos de las que disponemos en la mayor parte de nuestros hospitales públicos. En esta misma línea, estamos incrementando de año en año las actuaciones formativas para nuestro personal sanitario en temas relacionados con la infección del virus VIH.

Sin embargo, tal y como nos recuerda la OMS con el lema elegido por segundo año para la celebración de este Día Mundial, se abre ante nosotros un importante campo en torno a loa atención psicosocial del enfermo del Sida. De esta atención, dependerá en gran medida su integración en nuestra sociedad, y esa integración nos ayudará a seguir promocionando la prevención y la detección precoz del Sida.

Desde el comienzo de la epidemia del Sida, en la Comunidad Valenciana se han notificado 5.348 casos de inmunodeficiencia humana. Tras una primera etapa, hasta 1996, que estuvo caracterizada por una aumento anual del número de casos y por tanto de la tasa de incidencia, hemos conseguido contener y estabilizar ese incremento. Así, en el año 2002 se detectaron en la Comunidad Valenciana un total 171, una cifra ligeramente inferior a la del año 2001 (176 casos) mientras que hasta el mes de septiembre de 2003 se han notificado 60 casos de inmunodeficiencia humana en la Comunidad Valenciana.

Es necesario resaltar que las actuales cifras hacen referencia a casos de sida y no al conocimiento real de la incidencia, guardando relación estos niveles de casos con la eficacia de los tratamientos antirretrovirales, siendo un objetivo inmediato de esta conselleria el confirmar un registro que mejore la información sobre la incidencia real de la enfermedad, en colaboración con las asociaciones de afectados.

Nos hemos situado en una línea descendente en la que debemos mantenernos. Para ello, es importante tener en cuenta que aunque la incidencia del Sida se haya reducido, el riesgo de infectarse sigue siendo el mismo. Todos nuestros esfuerzos van a seguir encaminados a hacer real el lema de nuestra campaña contra el Sida: "Al Sida, ponle un cero".

Finalmente, me gustaría hacer un llamamiento a una mayor implicación institucional de orden mundial para facilitar el acceso de la terapia antirretroviral a los países más desfavorecidos, cuyo nivel de problemas es muy superior a nuestra realidad, sin dejar de reconocer por ello, que aún nos queda mucho por hacer.

Vicente Rambla es consejero de Sanidad.