Simancas afirma que el PSOE ha elegido la "decencia" en vez del "poder" en Caja Madrid

"Nosotros no nos sentamos con delincuentes", zanjó ayer Rafael Simancas, el candidato del PSOE a la Comunidad de Madrid. Simancas considera un "delincuente" a Ricardo Romero de Tejada y su presencia en el consejo de Caja Madrid y en la ejecutiva (el núcleo duro de dirección de la entidad) es el motivo que aduce para argumentar por qué se abstuvieron el lunes en la votación para reelegir a Miguel Blesa como presidente de Caja Madrid y por qué han quedado voluntariamente fuera de la ejecutiva de la entidad financiera. Mariano Rajoy, mientras, acusó a Simancas de haber intentado "romper la estabilidad de la caja", por la vía de "quitar a Blesa para poner a un señor con quien tiene relación": Ramón Espinar.

Rafael Simancas mantiene que su partido eligió "decencia y dignidad" en lugar de "poder y presencia" en la batalla por el control de Caja Madrid. Mariano Rajoy, mientras, defiende la tesis contraria. "El PSOE ha pretendido romper la situación de estabilidad en Caja Madrid, intentando echar al señor [Miguel] Blesa y no ha sido así", aseguró Rajoy, para quien Simancas sólo quería "poner en el lugar de Blesa a un señor con el que tiene buena relación", en referencia a Ramón Espinar.

Simancas afirmó que el PSOE, "por todos los medios", intentó evitar que Ricardo Romero de Tejada, a quien definió como "una persona a sueldo de una tapadera de negocios turbios" estuviera presente en la ejecutiva de Caja Madrid. "Pero no hemos podido cumplir con ese propósito", concluyó.

Espantada

El problema arranca de principios del verano, antes de que empezaran los trabajos de la comisión de investigación en la Asamblea de Madrid para investigar la espantada de dos diputados socialistas: Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez. Según destaca la dirección federal de Comisiones Obreras, el PP, el PSOE e IU votaron entonces a los candidatos al consejo de la caja en representación de la Asamblea de Madrid. "La presencia de Ricardo Romero de Tejada en las candidaturas, al margen de la opinión que nos merezca, no es un problema nuestro. Es de quienes lo votaron como candidato al consejo en representación de la Asamblea de la Comunidad de Madrid: PP, PSOE e IU", afirma en un comunicado el sector de banca de CC OO, afín a la dirección del sindicato. Fueron sus compromisarios quienes, presuntamente, votaron el lunes con el PP, aunque oficialmente la central dice que ignoran qué hicieron porque dieron libertad de voto a sus representantes.

Simancas no expresó ayer esas dudas y mantuvo que el PP "con tal de mantener el poder y el dinero no duda en pactar con los comunistas, a los que desprecia al considerar que apoyan a los secesionistas y a ETA".

Tampoco albergaba muchas dudas, aunque con otro tipo de diagnóstico, Mariano Rajoy, quien evitó en todo momento mencionar por su nombre a Ricardo Romero de Tejada.

En Toledo, donde acudió a presidir una reunión de la Junta Directiva Regional del PP de Castilla-La Mancha, Rajoy afirmó: "Una vez se celebraron las elecciones a la Asamblea de Madrid nos enteramos de que el primer objetivo del señor Simancas era echar al señor Blesa. Parece sorprendente, porque no creo que el primer objetivo tenga que ser echar al presidente de una caja. Por fortuna, yo creo que ayer se impuso el equilibrio y el señor Blesa, que ha hecho una gestión muy profesional, ha vuelto a ser elegido presidente. Sería bueno que el señor Simancas se ocupara de tomar decisiones que afecten al interés general".

Ese "interés general" pasa, según afirmó Simancas en un desayuno organizado por el Club Internacional de Prensa, por "la dignidad y la decencia". Y, según Rajoy, "decencia" es lo que le ha "faltado" a Simancas en su actuación sobre Caja Madrid. El argumento de Rajoy es que había unos compromisos: la lista de representantes por parte de la Asamblea de Madrid pactada entre el PP, el PSOE e IU. Y Simancas intentó romper "unilateralmente" ese acuerdo. "Los demás han cumplido sus compromisos y el PSOE se ha quedado solo. Quería romper unilateralmente unos acuerdos y se ha quedado solo", afirmó el candidato del PP a la presidencia del Gobierno.

La dirección federal de Comisiones Obreras e IU, mientras, mantienen que el PSOE buscó cerrar otro acuerdo a principios de septiembre. Según el relato de CC OO, el día 4 de septiembre hubo una reunión en el Círculo de Bellas Artes de Madrid a la que acudieron Ramón Espinar (PSOE), Miguel Abejón (UGT), Francisco Naranjo, Jaime Cedrún, Juan José Azcona, Antonio Rey, en representación de CC OO de Madrid, y Pedro Bedia, de la sección de banca de ese mismo sindicato. En esa reunión, siempre según IU y la sección de banca de CC OO, se expone la conveniencia de dar paso a un representante de UGT, que desplazaría a uno de los dos que tenía IU en el Consejo de Caja Madrid.

UGT e Izquierda Unida

Ese desplazamiento se consumó en la votación del lunes, con la entrada de Gonzalo Martín Pascual (UGT) y la salida de José Luis Acero (IU). El argumento de los socialistas fue que IU estaba sobrerrepresentada dados sus votos (13 de 320) y que no había ningún representante de UGT (con 15 votos). Esto no gustó ni a IU ni a la dirección federal de CC OO.

Los representantes de CC OO-Madrid sí vieron bien este acuerdo y argumentaron que podía complementarse con la presentación de dos listas del PSOE en la urna que elegía a los tres consejeros en representación de la Asamblea para intentar, con un acuerdo de toda la izquierda sindical y política en Madrid, que Romero de Tejada no saliera elegido. El secretario general del PP de Madrid iba como número dos de la lista del PP en esa urna y si las dos listas socialistas hubieran logrado aunar todos los votos de la izquierda, habría sido posible dejar fuera a Romero de Tejada del consejo de la cuarta entidad financiera de España.