El depósito de coches de Malilla, en Valencia, incumple normas de almacenaje y tratamiento, según el PSPV

El depósito de vehículos abandonados del barrio valenciano de Malilla, que sustituye al de la calle de Campos Crespos clausurado tras incendiarse en julio, "no cumple la legalidad vigente", denunció ayer el portavoz socialista en el Ayuntamiento, Rafael Rubio, en contra de las declaraciones del equipo de la alcaldesa, Rita Barberá, del PP, que lo calificó la semana pasada como "pionero en Europa".

"El aspecto del depósito es tercermundista", afirmó Rubio, quien aseguró que no está adaptado a las exigencias de un real decreto de diciembre de 2002. El decreto, según citó la concejal Carmina del Río, exige "zonas adecuadas al número de vehículos a almacenar y dotados de pavimento impermeable, con instalaciones para la recogida de derrames, de decantación y separación de grasa" y "equipos de tratamiento de aguas", entre otras condiciones. "Ya hay una acumulación de vehículos que incumple las condiciones, el suelo no está impermeabilizado y no hay tratamiento de aguas", dijo Del Río, quien advirtió de posibles vertidos a la acequia de Rovella. Un informe del Seprona, de la Guardia Civil, constata estas irregularidades, según Rubio, quien aún no ha recibido el documento.

El edil de Circulación, Alfonso Novo, negó el exceso de almacenamiento y declaró que el depósito tiene hasta 2006 para cumplir la norma -extremo que niega el PSPV-. Novo indicó que la nueva contrata de depósitos municipales, que se aprobará en 2004, exigirá todas las condiciones antes de ese plazo y que el centro de Malilla se está adaptando.