Las conserveras se comprometen a no comprar bonito a un precio inferior al mínimo establecido por la UE

Las empresas conserveras vascas se comprometieron ayer a respetar los precios mínimos de compra de bonito del Cantábrico establecidos como referencia en la Unión Europea. El acuerdo fue adoptado por los representantes de una veintena de conserveros en una reunión celebrada con el viceconsejero de Pesca, Luis Miguel Macías.

Este alto cargo recibirá hoy a los representantes de las cofradías de pescadores para informarles del compromiso alcanzado y recoger sus reclamaciones en relación con los problemas apreciados por los bajos precios -"irrisorios", según Esteban Olaizola, presidente de los pescadores guipuzcoanos- que se están pagando en lonja por el bonito este año. Ayer mismo se pagó en Hondarribia una partida de este pescado a a 1,38 euros el kilo cuando el precio mínimo se halla establecido en 1,54 euros por kilo.

Luis Miguel Macías declaró que había pedido a los conserveros que contribuyan a la recuperación del mercado respetando las recomendaciones de los Quince. Añadió que estas empresas se han comprometido a dar prioridad a la compra de bonito vasco frente a los de otras procedencias, así como a adquirir la mayor cantidad posible de aquel bonito con más problemas para salir al mercado, a pesar de las limitaciones que tiene ese formato pequeño para la elaboración de la conserva.

Los empresarios conserveros solicitaron, por su parte, que este acuerdo se extienda al resto de comunidades del Cantábrico, con el fin de que exista una "corresponsabilidad" de todas las empresas conserveras en el sostenimiento de los precios de los túnidos de la zona.

Los pescadores, por su parte, reclamarán hoy a Macías la creación de un consejo regulador que cree un label de origen del bonito de anzuelo pescado por los arrantzales que puedan controlar las cofradías para su venta a las compañías envasadoras. "Igual que el Gobierno vasco ha patrocinado nuestra cocina, queremos que se comprometa a proteger nuestra forma ecológica de pescar, con anzuelo, que no podrán exhibir los franceses que están pescando con red", afirmó Olaizola.