Muere Katharine Hepburn, estrella indomable
La eminente actriz murió ayer a los 96 años de edad en su casa de Connecticut rodeada de amigos
"Soy una actriz, pero también soy un carácter", dijo de sí misma en una ocasión Katharine Hepburn. "Una actriz sin personalidad no puede ser una estrella", aseguró otra vez. Ella era todo eso y murió ayer, a los 96 años, en su casa de Connecticut, rodeada de amigos, sin que nadie consiguiera arrebatarle su récord: ganó cuatro oscars a la mejor actriz y obtuvo 12 candidaturas. Su fuerza vital pudo con todo: con los estereotipos de Hollywood, los éxitos y fracasos en su carrera y una compleja relación de tres décadas con su mejor pareja en la pantalla, Spencer Tracy. Trabajó en cine y en teatro, y tras algunos papeles en Broadway, su interpretación en Doble sacrificio, de George Cukor, le abrió las puertas de Hollywood, donde se convirtió en una estrella indomable.
Personajes con carácter
A partir de los años setenta intervino esencialmente en producciones para televisión. En 1981 salió de su semiretiro para interpretar junto a Henry Fonda, que moriría poco después, En el estanque dorado. Aquello marcó prácticamente el fin de su fílmografía, salvo una breve aparición en 1994 en Un asunto de amor, un drama romántico protagonizado por Warren Beatty y Annette Bening. Hace poco, la actriz, ya mayor, confesó simplemente. "No he lamentado nada si lo disfruté cuando lo hice".
