La flota cántabra de cerco no sale a faenar pese a levantarse la veda

Ninguno de los aproximadamente 65 barcos que integran la flota de cerco -arte de rodeo con red, principalmente para la pesca de la sardina- en Cantabria salieron ayer a la mar pese al levantamiento de la veda. Tal y como decidieron el pasado fin de semana, los pescadores cántabros no saliron a pescar al considerar que el estado de las aguas no es el adecuado.

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación levantó ayer la veda de pesca de cerco para las zonas afectadas por el vertido del Prestige desde Punta de Ontón, en las proximidades de Castro Urdiales, hasta Punta Candelaria, de acuerdo a los informes del Instituto Español de Oceanografía (IEO). El informe del IEO, que analiza toda la información disponible sobre las interacciones del arte de cerco con el fuel y la distribución del vertido en el Cantábrico, concluye que "las concentraciones de fuel en superficie o fondo en esta zona son actualmente muy bajas y, por tanto, compatibles con las operaciones de pesca en la zona".

El presidente de la Federación de Cofradías de Cantabria, Tomás Cos, indicó a Europa Press que no salen a la mar porque, dijo, "estamos en las mismas condiciones que el sábado". Aunque a partir de ayer ya no habrá subvenciones para quienes no salgan a pescar, Cos subrayó que la flota de cerco cántabra se va a mantener amarrada hasta que tengan la seguridad de que las aguas son aptas para la pesca.

Respecto al hecho de que los pescadores de otras zonas hayan salido a faenar, como es el caso de los vascos, el representante de las cofradías de Cantabria indicó que ellos han estado en la mar "y dicen que no han visto nada pero nosotros hemos visto las manchas que hay y lo que ha llegado". Por ello, indicó Cos, no hay una fecha para que la flota de cerco cántabra reanude sus actividades.

Acuerdo en Asturias

En Asturias, las doce embarcaciones pesqueras que dejaron de faenar como consecuencia de la marea negra causada por la catástrofe del Prestige, todas ellas dedicadas al arte del cerco, reanudarán la actividad el próximo día 14, según un acuerdo alcanzado con las autoridades de pesca de la comunidad.

Los doce cerqueros se dedican a la captura de sardinas y otras especies cerca del litoral. Por hacerlo de noche, carecen de visibilidad suficiente para evitar las posibles manchas de fuel que pudieran hallarse en sus zonas habituales de trabajo, razón por la que el Principado accedió a sufragarles la parada. El resto de las casi 600 embarcaciones de la flota pesquera asturiana han seguido faenando con normalidad desde que se produjo el hundimiento del petrolero.