_
_
_
_

José María Guelbenzu recupera 'El sentimiento' como su "mejor novela"

Jesús Ruiz Mantilla

"No he cambiado ni una coma; además, lo he hecho a conciencia, porque no lo necesita". Tan seguro está José María Guelbenzu (Madrid, 1944) de que El sentimiento es su mejor obra que lo predica a los cuatro vientos. Lo dijo tambén la crítica cuando apareció en 1995, pero por esas cosas de las prisas del mercado literario y los fenómenos meteóricos de dos meses, esta novela ambiciosa, jugosa, poblada de gente que se explica sin tapujos, tuvo la vida de un suspiro.

Han pasado ocho años desde que este autor presentara al mundo en El sentimiento, que ahora se reedita en Alfaguara, a Diana de la Riva e Isabel McVee, dos mujeres opuestas, enfrentadas, recelosas, con vidas dispares, pero con miedos comunes. "Son como agua y aceite, van juntas pero no se mezclan. Quería trabajar con el género femenino por su complejidad y más en un tipo determinado de personas, en una cierta edad y en un país especial", asegura Guelbenzu.

Una, De la Riva, es una amita de su casa, una mujer de servidumbres sociales, volcada en los demás, con una edad de riesgo para muchas cosas, para la soledad, el desencanto, el desamor, los desmoronamientos. Otra, McVee, se define: "Yo soy un tiburón hembra, no una hija de puta". Pisa fuerte, hasta el punto de que en un momento de la construcción de la novela el autor tuvo miedo de que se comiera a la otra. "Una lucha por la vida y la otra lucha sin ella porque la tiene resuelta. Isabel McVee me exigía cada vez más por su concepción del mundo y de las cosas, tuve miedo de que eclipsara a Diana y decidí ponerle freno", dice Guelbenzu. Delimitar el mundo femenino era una espina que el autor se quería sacar. "Tenía ganas de hacerlo, me gusta más el mundo de la mujeres".

Y lo hace, sobre todo, dejándolas hablar, a ellas y a todos los personajes, porque El sentimiento es una novela en la que los personajes se definen hablando, uno de los retos contemporáneos de la sugerencia, explica el novelista: "Tienen que hablar lo justo para que descubramos qué guardan de boca para adentro, en eso consiste ejercitar la sutileza; es para mí el colmo de la sugerencia".

Está convencido de que eso, la sugerencia, es la madre del cordero de la literatura moderna. Quien mejor deje ver entre líneas, será el rey. Pero eso debe ir acompañado de los grandes temas. Y en El sentimiento, el autor de El mercurio, La noche en casa y El río de la luna, según él, "la novela que yo llevo en la chepa", es decir, la que le ha marcado, hay una gran disertación, un gran asunto: "El sentimiento conforma tanto a las personas como el pensamiento".

"Hay sentimientos tan intensos en la vida de una persona que acaban condicionando su conciencia. Sentimientos de pavor, de felicidad, de abismo, de encanto, de muerte. "La percepción de la muerte modifica y amplía horizontes, no lo sabes hasta que no lo percibes, hasta que no lo tienes delante", dice. Y también la experiencia que se desgaja de esas alegrías, desgracias: "El sentimiento es una carga de experiencia también".

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Jesús Ruiz Mantilla
Entró en EL PAÍS en 1992. Ha pasado por la Edición Internacional, El Espectador, Cultura y El País Semanal. Publica periódicamente entrevistas, reportajes, perfiles y análisis en las dos últimas secciones y en otras como Babelia, Televisión, Gente y Madrid. En su carrera literaria ha publicado ocho novelas, aparte de ensayos, teatro y poesía.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_