Pujol confía en que Martín Villa logre poner orden en la limpieza del chapapote

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, otorgó ayer a Rodolfo Martín Villa un plus de confianza como comisionado para la crisis del Prestige: "Tiene más tiempo que Rajoy para dedicarse" y es un "hombre competente y con mucha experiencia". Pujol aludió a la descoordinación que se registra en Galicia en la lucha contra el chapapote y dijo que está "desconcertado" por el vodevil en que, según él, se ha convertido el envío de tres barcos catalanes para recoger fuel vertido por el petrolero y que han sido rechazados por la Xunta de Galicia. Los barcos serán desviados a Asturias.

En Tarragona, Jordi Pujol se mostró confiado en que el nombramiento de Martín Villa sirva para terminar con la descoordinación que ha presidido las tareas de limpieza de fuel en Galicia y, en especial, con el conflicto surgido entre la Administración gallega y la catalana por los remolcadores fletados por la Generalitat. "Él tiene tiempo para hacerlo, porque imagino que [Mariano] Rajoy no tiene tiempo para dedicarse", comentó.

Pese al conflicto, el presidente catalán culpó de la descoordinación al Gobierno central y se esforzó en exculpar a la Xunta -"tiene muy pocas competencias"- frente a las críticas que ha recibido de la oposición y de colectivos sociales por la gestión de esta crisis, a la vez que reclamó para la Generalitat las competencias en materia de playas, costas, salvamento marítimo y capitanía marítima.

Después de más de tres días parados en el puerto, hoy saldrán a la mar los tres remolcadores antifuel fletados por el Gobierno de la Generalitat. Ayer, el conseller en cap, Artur Mas, anunció que los barcos recogerán chapapote frente a las costas de Asturias, según han acordado los Gobiernos central, catalán y asturiano.

Según Mas, no se ha producido ultimátum alguno de retirar esta flota, que había sido pedida por el Bloque Nacionalista Galego (BNG), y la resolución de lo que consideró una situación "ridícula" se debe al "sentido común", ya que la permanencia de los buques en el puerto de A Coruña "no podía mantenerse eternamente". Mas señaló que la Generalitat ha asistido "atónita" al "espectáculo" provocado por las diferentes Administraciones ante el "gesto de solidaridad" de Cataluña, que "cuesta un dinero, aproximadamente 180.000 euros, y que lo que queremos es que se aproveche".

El Gobierno central calcula en al menos 990 millones de euros el dinero que España deberá gastar durante este año para paliar las consecuencias del naufragio. Así lo afirma el Ministerio de Hacienda en una carta enviada a Bruselas al presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi. En esa carta, el ministro Cristóbal Montoro expresa la petición formal del España de beneficiarse, aparte de otras ayudas europeas, de los 200 millones de euros del fondo instituido por el Consejo Europeo de Copenhague, en diciembre pasado, informa Gabriela Cañas.

El batiscafo Nautile logró tapar ayer dos fugas del Prestige, con lo que las grietas controladas son ya 12, de las 20 localizadas.