Corea del Norte pide a sus ciudadanos que sirvan de "bombas humanas contra EE UU"
Rusia se ofrece para mediar en el desafío nuclear entre Washington y Pyongyang
El ministro de Defensa norcoreano, Kim Il-Chol, ha pedido a todos los soldados y civiles del país que se conviertan en "bombas humanas" contra EE UU en la crisis que enfrenta a los dos países por cuestiones nucleares. La declaración se produce cuando Pyongyang desmantela los últimos equipos de control colocados por la ONU en las instalaciones nucleares norcoreanas. El director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Mohamed el Baradei, cree que no se puede descartar que Corea del Norte desvíe material fisible con fines bélicos.
"Todos los oficiales y los hombres del KPA [Ejército del Pueblo Coreano] deben prepararse para transformarse en bombas humanas y combatientes dispuestos a hacerse explotar para defender el asedio de la revolución", dice la declaración del ministro de Defensa. "Si osan provocar la guerra nuclear, el Ejército y el pueblo de la República Democrática y Popular de Corea, encabezados por Kim Jong-Il, el comandante invencible, se levantarán para infligir un castigo determinado y sin piedad a los agresores imperialistas americanos, con la fuerza de la unión, más potente que una bomba A", añade.
Mohamed el Baradei ha expresado su preocupación por la decisión de Pyongyang de interrumpir unilateralmente el sistema de vigilancia que había instalado la agencia especializada de la ONU en sus centros nucleares. Sólo si la OIEA puede reanudar inmediatamente los controles en las centrales nucleares en las que los había instalado el organismo puede garantizar que Pyongyang no desvía material fisible para la fabricación de armas atómicas u otras. El Baradei subraya que el control de las instalaciones nucleares, con precintos y cámaras de televisión, está en consonancia con el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares suscrito por Corea del Norte.
El Departamento de Estado norteamericano declinó comentar esta declaración, pero reiteró que no negociará desde el chantaje y anunció el envío en enero de un alto funcionario a Corea del Sur para tratar de la crisis.
Desde Moscú, el Kremlin exigie a Corea del Norte que reanude de inmediato las negociaciones con la OIEA. Alexandr Yakovenko, portavoz del Ministerio de Exteriores, aseguró en el día de Nochebuena que Rusia estaba dispuesta a mediar en la crisis coreana y dijo que su Gobierno había recibido "con interés" la propuesta formulada por Estados Unidos a Rusia y China para que intervengan en ese sentido ante las autoridades norcoreanas. "Rusia desea participar activamente en los esfuerzos diplomáticos para desarrollar un diálogo que desemboque en un estatuto de zona libre de armas nucleares para la península de Corea", aseguró Yakovenko al comentar la propuesta del presidente estadounidense, George Bush. Rusia mantiene desde la época soviética una relaciones privilegiadas con el régimen comunista de Pyongyang.
Mientras, el presidente iraní, Mohamed Jatamí, reiteró que Teherán entregará a Moscú el combustible nuclear que se use en la central de Bushehr, que están construyendo los rusos. Alexandr Rumiántsev, el ministro de Energía Atómica de Rusia, que el martes se hallaba inspeccionando los trabajos en Bushehr, aseguró que pronto se firmará un documento complementario del acuerdo sobre la exportación a Rusia de dicho combustible. Los contratos para la construcción del primer bloque de esa central, que deberá estar terminado en mayo, superan los mil millones de euros. El Kremlin tiene planes de construir otros dos bloques en Bushehr y otra central de tres bloques en Ahwaz.
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