ELA afirma que el fraude fiscal ha vuelto a aumentar en Euskadi y Navarra

ELA asegura en su Informe fiscal de 2001, presentado ayer en Pamplona, que el fraude fiscal ha aumentado en el País Vasco y Navarra, y constata que los asalariados siguen declarando en el impuesto sobre la renta ingresos medios muy superiores a los declarados por empresarios y profesionales. Las rentas del trabajo suponen el 70% del los impuestos directos recaudados por las haciendas vascas y el 62,7% en Navarra.

Según el informe, la presión fiscal global en 2000 disminuyó en Euskadi en 0,75 puntos (20,38%) y bajó también en las rentas empresariales, profesionales y de capital en un 0,07%. ELA, como viene destacando en los últimos años, sostiene que las rentas más perjudicadas son la de trabajo, donde aumentó la presión. El incremento de los impuestos indirectos en el Estado y la disminución de la imposición directa en Euskadi y Navarra lleva a la dentral a afirmar que los modelos impositivos forales son cada vez peores para las rentas del trabajo y que el fraude fiscal 'ha vuelto a aumentar'.

En 2001 las haciendas forales vascas recaudaron 1,37 billones de pesetas, con un aumento del 2,7% respecto al año anterior. El IVA volvió a ser el impuesto más importante (476.989 millones de pesetas y una caída de dos centésimas sobre el 2000). Por el contrario, el IRPF (456.486 millones) creció un 8%. El Impuesto de Sociedades (160.603 millones) aumentó un 6,63% y los impuestos especiales (175.649 millones) cayeron un 3,4%.

Respecto al peso de las distintas rentas en el IRPF, el estudio de ELA se remite a los datos más recientes de que dispone, las rentas obtenidas en 1998. Nuevamente las de trabajo soportan la mayor parte de los impuestos directos, un 85% en Álava, un 84,1% en Guipúzcoa y un 83% en Vizcaya. Las rentas empresariales, profesionales y artísticas supusieron un 10,39% del IRPF total en Guipúzcoa, un 10,31% en Álava y un 8,23% en Vizcaya. El resto, (capitales mobiliarios e inmobiliarios y ganancias patrimoniales), fueron de un 8,77% en Vizcaya, un 5,45% en Guipúzcoa y un 4,6% en Álava.

Un año más, los trabajadores vascos declararon ganar bastante más dinero que los empresarios, los profesionales liberales o los artistas. La renta media de trabajo declarada en Álava en 1998 fue de 2,4 millones de pesetas frente a 1,8 de media empresarial, profesional y artística. En Guipúzcoa esas cifras fueron 2,6 y 1,7 millones y en Vizcaya, 2,5 y 1,5 millones. Y en Navarra los asalariados declararon 3,1 millones de pesetas de media, frente a 1,7 de los empresarios y 1,4 de los profesionales.

La aparente tendencia positiva en la progresividad del impuesto registrada el pasado año, al haber disminuido su peso los principales impuestos indirectos en un 0,8% sobre el total de concertados, mientras crecían un 2% los directos, se explica, a juicio del sindicato, en la negativa evolución de la imposición indirecta. 'En 2001, ejercicio en el que se produjo un considerable crecimiento económico en la Comunidad Autónoma Vasca, resulta difícilmente justificable que la recaudación por IVA haya crecido sólo un 2,7% y que hayan caído un 3,42% los ingresos por impuestos especiales. Una causa de ello puede ser el aumento del fraude fiscal', señalaron Mikel Noval y Julene Gabiola, responsables del gabinete de estudios de ELA.

El análisis de ELA, basado en los datos oficiales suministrados por el Órgano de Coordinación Tributaria, el Consejo Vasco de Finanzas y las haciendas forales, resalta que la recaudación de las rentas de trabajo (449.483 millones) sumó el 69% de la imposición directa de Euskadi, con un aumento del 1,14% sobre 2000. Por su parte, las rentas empresariales, profesionales y de capital (impuesto de sociedades e IRPF empresarial, profesional y de capital) aportaron 216.269 millones de pesetas, un 33,23% del total.