Villalobos amenaza con dimitir en una reunión del PP

La primera reunión de coordinación en materia sanitaria, celebrada el martes por la dirección del PP con sus altos cargos nacionales y autonómicos y expertos en Sanidad, no pudo terminar peor. La ministra, Celia Villalobos, arremetió contra el consejero madrileño de Sanidad, Ignacio Echániz, cuando éste abogó por abrir el debate sobre una nueva ley general de sanidad. Villalobos, en tono duro y sarcástico, dejó secos a los reunidos cuando ofreció tres salidas: 'O la ley se queda como está, o le digo a José María Aznar que suprima el ministerio, o yo me voy, dimito, y que te nombre a ti ministro'.

El secretario general del PP, Javier Arenas, al constatar la necesidad de la reunión entre todos los cargos populares, admitió implícitamente en su discurso los fallos registrados hasta ahora por parte del Ministerio de Sanidad en la dirección de una política sanitaria uniforme. También corroboró la falta de un documento explícito sobre la prometida ley de coordinación, que el PSOE, sin embargo, sí ha elaborado y presentó precisamente ese martes en el Congreso.

Villalobos habló justo después de Arenas para agradecer de una forma que varios de los asistentes interpretaron con malicia su 'reciente interés' por los asuntos sanitarios. Es una leyenda escrita en el PP hace tiempo que las relaciones entre Arenas y Villalobos no son buenas, por sus diferentes maneras de ver la política, por ejemplo, en Andalucía. Responsables del PP que acudieron a la reunión destacan, sin embargo, que gracias a que la convocatoria era de Arenas muchos consejeros autonómicos de Sanidad de ese partido decidieron asistir, en contra de lo que hacen cuando la cita parte de Villalobos. De hecho, el día anterior, el lunes, hubo un encuentro en el ministerio del comité interterritorial de sanidad a la que faltaron numerosos consejeros, especialmente los de las comunidades del PSOE. Y a la comida organizada previamente por el ministerio sólo acudieron dos consejeros del PP.

El enfrentamiento de Villalobos con Echániz sorprendió por su estilo, pero no era nuevo. La ministra hace tiempo que mira de reojo las ambiciones del joven consejero de Madrid, amigo personal del hijo de Aznar y del futuro yerno, Alejandro Agag. Echániz aprovechó esa reunión ante Arenas y Ana Mato, coordinadora de Acción Sectorial, para proponer que en vez de abordar una ley de coordinación con muchos problemas, un partido como el PP en el Gobierno debía tener la ambición de impulsar su ley general de sanidad porque la vigente la aprobó el PSOE en 1986. No hubo ocasión al debate. Villalobos cortó por lo sano.