El Congreso aprueba tímidas medidas contra el acoso moral

La comisión sobre Política Social y Empleo del Congreso de los Diputados aprobó ayer por unanimidad una enmienda transaccional, que el PSOE ha negociado con el PP y con CiU, destinada a prevenir y sancionar el acoso moral en el trabajo. Se aprobaron tres puntos: en el primero se insta al Gobierno a que redacte un estudio sobre la incidencia, causas y consecuencias del acoso moral en el trabajo, tanto en España como en la UE. La elaboración de este primer diagnóstico ya se aprobó en el Senado en primavera y el PSOE no quiso ayer que se quedara de nuevo sólo en eso.

Consiguieron negociar un segundo punto para que se dote a los inspectores de trabajo de la información suficiente 'para atender las denuncias que se produzcan relacionadas con el acoso moral y para que sepan detectarlo en las empresas', según explicó la diputada socialista Isabel López.

El tercer punto recoge la posibilidad de incluir el acoso laboral en la Ley de Riesgos Laborales. Los socialistas pretendían que fuera considerado como enfermedad laboral y que se sancionara a los acosadores con una 'falta muy grave', pero no consiguieron ninguna de las dos cosas.

Por eso Isabel López califica lo aprobado ayer como 'un pequeño pasito sobre el que habrá que seguir machacando', y lamentó que el PP no quisiera ir más allá. 'Hay que seguir insistiendo', afirmó la diputada socialista.

Según una encuesta del pasado junio elaborada por la Universidad de Alcalá de Henares, el acoso moral en el trabajo afecta a más de 11 millones y medio de trabajadores españoles.

López considera que las cifras de víctimas por acoso laboral están empezando a ser 'alarmantes'. La media de trabajadores afectados en ocho países de la Unión (Finlandia, Reino Unido, Países Bajos, Suecia, Bélgica, Portugal, Italia y España), asciende al 9%, más de 13 millones de personas, según la Tercera encuesta europea sobre condiciones de trabajo 2000, publicada por la Organización Internacional del Trabajo en diciembre pasado.