Penderecki vaticina que en 20 años no habrá vanguardias
El compositor y director polaco Krzysztof Penderecki, de 68 años, que esta tarde recibirá el Príncipe de Asturias de las Artes, aseguró ayer en Oviedo que el arte en general y la música en particular no conocerán nuevas vanguardias que abran caminos inéditos en la creación antes de la segunda década de este siglo. Penderecki considera que no es previsible una gran renovación radical del arte antes de los próximos veinte años porque 'aún no se ha digerido' la gran oleada de innovaciones que produjeron las últimas vanguardias desde los años cincuenta y sesenta del siglo XX.
Nacido en Debica (Polonia) en 1933, Penderecki se convirtió en intérprete y creador polifacético de gran proyección y prestigio internacionales desde muy joven. Aunque actualmente se le considera un clásico, estuvo íntimamente vinculado a la experimentación. 'Lo que ahora se conoce como vanguardia es la continuación de las propuestas más avanzadas de los años cincuenta y sesenta, cuando, tras el marasmo y el estancamiento de la guerra mundial, la música, pero también la pintura, la arquitectura, la literatura y otras artes, entraron en una enorme ebullición y todos queríamos, partiendo de los fundamentos, crear un nuevo arte. Fue una época en la que se creaba música a mucha velocidad. Se hizo tanto que aún no se ha digerido. Ahora mismo no hay innovación, sólo continuación de aquellas vanguardias'.
Grandes tragedias
El autor de obras que conmovieron al mundo por su dimensión humanista y solidaria, y por la fuerza y dramatismo con las que recreó grandes tragedias, como Threnody for the victims of Hiroshima -a propósito de la utilización de la bomba atómica en el verano de 1945- o Die irae -un homenaje a las víctimas del campo de concentración nazi de Auschwitz-, afirmó, ahora que el mundo vive una guerra global de características novedosas, que su arte 'ya no está tan involucrado con la actualidad y con los acontecimientos del momento'.
En la actualidad, anunció, se dedica a cerrar el ciclo de sus sinfonías; está centrado en la composición de diez obras para orquesta y está trabajando en dos óperas. Este cambio de inquietudes y fuentes de inspiración no entraña una modificación de sus presupuestos artísticos capitales. Hoy, como antaño, Krzysztof Penderecki asegura que compone para sí mismo. 'Compongo pensando en lo que me va a satisfacer. Lo que ocurre es que tuve la suerte de que mi música haya sido del interés del público'.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.