Empleados de Astilleros en Sevilla cortan la SE-30 en protesta por la falta de trabajo

Unos 900 empleados de la factoría de Astilleros en Sevilla, según el comité de empresa, cortaron ayer el tráfico de la autovía de circunvalación de la capital de Andalucía, la SE-30, desde las 6.30 de la mañana y hasta pasadas las 9.00. Mientras duró la protesta, los trabajadores enarbolaron una pancarta con el lema 'El PP no cumple lo firmado. Barcos YA' y quemaron papeles y neumáticos.

La movilización, que colapsó el tráfico en la autovía en ambos sentidos durante casi tres horas a la altura del Puente del Quinto Centenario, es un 'toque de atención' para la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), la empresa pública propietarioa del astillero. Así lo afirmó ayer el presidente del comité de empresa de la factoría, Ignacio Sánchez.

Sánchez afirmó que la situación actual de la cartera de pedidos de la factoría preocupa enormemente a los trabajadores. 'Ahora mismo estamos centrados en terminar un barco, cuya botadura está prevista para el próximo miércoles 19. Pero no tenemos nada contratado para cuando terminemos con él', dijo.

En la actualidad trabajan en Astilleros en Sevilla unos 1.300 trabajadores, 400 fijos y 900 en la industria auxiliar. Tras la botadura del barco en el que ahora trabajan, quedará faena en ese navío hasta febrero o marzo, pero cada vez será necesaria menos mano de obra en él, explicó Sánchez.

Nuevos negocios

El comité de empresa conoce la existencia de negociaciones para contratar la construcción de varios buques pero, mientras no se cierren las mismas, el número de trabajadores empezará a reducirse a partir del próximo miércoles. 'Es necesario buscar y confirmar nuevos negocios. Mientras tanto, podríamos ir adelantando bloques de otras factorías, pero es una opción que no interesa a los trabajadores', dijo Sánchez.

Ante la inminente botadura, la semana próxima, Sánchez garantizó que no serán convocadas nuevas movilizaciones. 'Ese día también supone un reconocimiento para nuestro trabajo. Es un motivo de orgullo. Pero después, ya veremos', concluyó Sánchez, que no quiere que sus protestas afecten al acto, al que está previsto que asista la presidenta del PP en Andalucía, Teófila Martínez.

El Astillero de Sevilla no es el único en el que son previsibles problemas laborales a corto plazo. El comité de empresa de Izar, el grupo surgido de la fusión de Astilleros y Bazán, en San Fernando, se reunirá mañana con el presidente de la compañía, José Antonio Casanova, para tratar una preocupación similar a la de sus compañeros sevillanos, la falta de carga de trabajo que la factoría isleña padece desde marzo.

El presidente del comité de empresa, Joaquín Chulián, aseguró a Europa Press que espera que Casanova cumpla su compromiso de mantener la carga de trabajo que les aporta los módulos de las fragatas F-100, que les llega desde la factoría de Ferrol, en Galicia, mientras no se les encargue la construcción de ningún otro buque.

En esta línea, Chulián afirmó que en el caso de que la empresa no cumpla este compromiso volverán a las movilizaciones y asambleas que llevaron a cabo durante el mes de julio. El comité de empresa, que representa a 1.321 trabajadores, aseguró que ya 'no hay más margen de confianza para promesas' y espera que el presidente de Izar cambie de actitud y les proporcione una solución definitiva.