El primer ministro macedonio llama a recuperar el territorio ocupado por la guerrilla

El primer ministro de Macedonia, el nacionalista eslavo Ljubco Georgievski, apeló ayer a recuperar los territorios ocupados por la guerrilla albanesa del Ejército de Liberación Nacional (ELN). Se manifestó optimista Georgievski ante la posibilidad de firmar un acuerdo de paz, pero añadió: 'Una cosa es firmar el documento avergonzados e insultados y otra cosa hacerlo como macedonios honorables que ganaron y supieron cómo liberar el territorio'.

Georgievski pronunció estas palabras en la localidad de Prohor Pcinski, situada en el sur de Serbia, cerca de la frontera con Macedonia, en un monasterio donde ayer se celebró el aniversario de la incorporación de Macedonia a Yugoslavia el 2 de agosto de 1944. Con motivo de esta festividad se interrumpieron ayer las conversaciones de Ohrid, donde el miércoles se había logrado un principio de acuerdo en la espinosa cuestión del uso oficial de la lengua albanesa en Macedonia.

El acuerdo prevé que los diputados albaneses podrán emplear su lengua en el Parlamento y en las comisiones y también se usará en los juzgados. Las leyes se redactarán en los dos idiomas, macedonio y albanés. El Gobierno mantendrá el macedonio como idioma de sus sesiones. El albanés será también lengua oficial en aquellos municipios donde el porcentaje de población albanesa supere el 20%. Se estima que los dos millones de albaneses suponen un cuarto de la población de Macedonia. En algunas regiones del noroeste, que limitan con Kosovo y Albania, los albaneses constituyen una mayoría abrumadora de un 80%.

Echar leña al fuego

Las declaraciones de Georgievski, unidas a los repetidos incidentes armados y ataques por parte de la guerrilla del ELN, hacen temer por la solidez del acuerdo que se pueda lograr en Ohrid. En las negociaciones de paz están representados los dos partidos albaneses con representación parlamentaria, pero no el ELN.

Poco antes de lograr el compromiso sobre la lengua murió un policía macedonio de 28 años, abatido por las balas de la guerrilla. Ayer, en las cercanías del estadio de Tetovo, la segunda ciudad de Macedonia, con una abrumadora mayoría albanesa, cayó herido otro policía macedonio.

También estos incidentes, repetidos a pesar de los sucesivos intentos de lograr un acuerdo, vienen a echar gasolina al fuego y hacen temer lo peor para la paz en Macedonia. Si se lograse un acuerdo de paz, unos 3.000 efectivos de la OTAN acudirían a Macedonia para proceder al desarme del ELN.

Las declaraciones del primer ministro ponen también de manifiesto la división entre las filas eslavas entre los duros, como el propio Georgievski, y los moderados, como el presidente Boris Trajkovski. Sostiene Georgievski: 'Por desgracia, hoy día tenemos un pueblo fuerte y decidido, pero un liderazgo indeciso'.