España sigue creyendo en Argentina

Las empresas españolas tienen invertidos unos cinco billones de pesetas en Argentina, nada menos que el 5% del PIB español y en torno al 10% del argentino. A pesar de la profunda crisis que vive la economía del país suramericano, la segunda en menos de cinco meses, las grandes compañías han asegurado que, al menos de momento, mantendrán intactos sus planes de inversión en Argentina.

Hace apenas una semana, el presidente de Repsol YPF, Alfonso Cortina, manifestó su optimismo en el futuro del país y su apoyo a quien le toque lidiar con la crisis. El mensaje fue abierto, no respaldó a un ministro de Economía en concreto, ni a López Murphy, que tras 15 días en el cargo renunció el lunes pasado, ni a Domingo Cavallo, que acaba de tomar las riendas de la cartera más difícil del país. Repsol YPF se convirtió en el mayor inversor español en Argentina tras la compra de la petrolera YPF en 1999. Ya ha apostado en torno a 2,1 billones de pesetas, y de los tres billones que invertirá entre este año y 2005, casi la mitad irá a parar a proyectos de exploración y producción petrolera en Argentina.

Repsol YPF, la empresa que más dinero ha invertido, ve con optimismo el futuro del país

Telefónica, con alrededor de 1,7 billones de pesetas; los grandes bancos, BSCH y BBVA, con 450.000 y 225.000 millones, respectivamente, y Endesa, con unos 45.000 millones, componen, junto a Repsol YPF, el grupo de inversores con las apuestas más fuertes. Pero no son los únicos: Gas Natural (45% de Repsol YPF), Aguas de Barcelona, Pescanova, Indra, Mapfre, FCC, Sol Meliá, Grupo Santillana o Campofrío, también han visto importantes oportunidades de negocio en Argentina.

Las grandes compañías no han revisado sus planes de inversión en Argentina. 'Nos hemos jugado mucho y ahora no nos queda más remedio que ir hasta el final', comenta una fuente de una de las compañías con mayor presencia en América Latina, y Argentina en particular. A estas empresas también les preocupa la evolución de la economía de Perú, país donde se celebrarán elecciones generales el próximo 8 de abril, y el impacto de una posible devaluación del peso argentino en Brasil. El viernes pasado, el director de comercialización para Brasil de Sun Microsystems, Ander Echevarría, aconsejó a sus distribuidores que 'limitasen sus deudas en dólares en caso de que se desplome el real', según la agencia Bloomberg.

Al igual que Repsol YPF, las compañías españolas con gran presencia en el mercado argentino prevén que la economía de aquel país se recuperará. Para las medianas, la situación es mucho más inquietante y las perspectivas no son tan buenas. Es de destacar que una empresa de nuevas tecnologías como LaNetro.com haya congelado recientemente su plan de expansión en Argentina 'por la situación del país', según Javier Pérez Dolset, presidente de la compañía. 'No significa nuestra retirada del mercado', señaló Pérez, 'sino una pausa para ver cómo evoluciona la situación'. Según fuentes empresariales españolas, las medianas empresas que pensaban seguir la estela de las grandes en Argentina están revisando sus proyectos y muchas seguirán el ejemplo de LaNetro.com.

Si ya los hechos acaecidos en Argentina han echado para atrás a las medianas empresas y 'han puesto en alerta' a las grandes, como reconoció un portavoz de una de estas compañías, un informe del servicio de estudios de Caja Madrid lanzado el viernes aumenta la inquietud, y con datos concretos.

La entidad financiera advierte de que el indicador del riesgo país, el diferencial a largo plazo con los bonos estadounidenses, se disparó el pasado viernes cerca de los 1.055 puntos, muy por encima de los 975 a los que llegó con la dimisión del vicepresidente Chacho Álvarez en noviembre pasado. 'Con el país experimentando una deflación, los tipos reales de interés a largo plazo están en torno al 15%, lo que, teniendo en cuenta el elevado volumen de la deuda pública (125.000 millones de dólares, 23,4 billones de pesetas), supone un encarecimiento del servicio de la deuda insostenible', explica el informe. La entidad observa esto a pesar de que Argentina cuenta con un blindaje financiero coordinado por el FMI de 40.000 millones de dólares y podría tener serios problemas para afrontar los pagos de los intereses de deuda, que ascenderán este año a unos 20.000 millones de dólares.

Caja Madrid también destaca que las reservas del banco central se han reducido en 2.000 millones de dólares (374.000 millones de pesetas) desde el 1 de marzo. El informe destaca que en los últimos días de la semana pasada el banco central argentino no ha informado, como lo hace a diario, del nivel de reservas. 'El hecho', señala la entidad, 'nos hace pensar que la situación es más tensa de lo que se observa'.

Caja Madrid ha calculado que 'la probabilidad que asigna el mercado a la ruptura de la paridad antes de tres meses superaba el 35% el último viernes'. A principios de febrero, el porcentaje era apenas del 8%.

La entidad advierte de que 'un tercer año de crecimiento negativo sería la puntilla para el actual esquema de política económica. Los ratios de la deuda externa (ahora en el 54% del PIB) o del servicio de la misma (73% de las exportaciones) que ya son elevados, se situarían en una zona que desalentaría la entrada del ahorro del exterior e incentivaría la salida de capitales. La imposibilidad de hacer frente a los compromisos externos se llevaría por delante el esquema cambiario. Teniendo en cuenta que el 90% de la deuda está en dólares, que la mayoría de las familias y empresas argentinas están endeudadas en divisa estadounidense y que el 25% de la deuda en circulación de los países emergentes es argentino, los efectos serían traumáticos'.

Fuentes del sector empresarial español con las que se comentó el informe sostienen que seguirán creyendo en Argentina, a pesar de que reconocen la gravedad de la situación.