El PSPV propone que los entes metropolitanos tengan financiación del Estado y la Generalitat

Frente al proyecto propuesto por el PP, que subsume la autonomía municipal en en ente y perpetúa el nivel competencial que ya existía en el CMH, el PSPV presentará un proyecto alternativo cuya principal aportación consiste en aumentar las competencias de las áreas metropolitanas y la obligación del Estado y la Generalitat a colaborar en su financiación. El diputado Juan Jesús Ros, alcalde de Torrent y miembro de la Comisión de Administraciones Públicas de las Cortes, será el encargado de defender la propuesta socialista.

El PSPV no sólo rechaza el modelo metropolitano para L'Horta de los populares, también el sistema de votos en las entidades metropolitanas que se puedan crear en el futuro ya que beneficia a los consistorios gobernados por el PP. El alcalde socialista de Elx, Diego Macià, ha anunciado que presentará enmiendas debido a que su municipio quedaría en minoría política si se crea un ente metropolitano en el eje Alicante-Santa Pola-Elche. En ese sentido ayer se celebró en el Ayuntamiento ilicitano una reunión entre los portavoces del PSPV, EU y representantes de los más de 150 colectivos que se han manifestado en contra de la ley, informa Pablo Albaladejo. Como fruto del encuentro se ha constituido una comisión que coordinará las actividades en protesta denominada Unidos por Elche.

Con respecto a L'Horta, para Ros el proyecto del PP supone 'un retorno a la Gran Valencia' porque 'convierte a los municipios de la comarca en barrios de la capital'. El modelo popular no supone ningún avance administrativo ya que aumenta la burocracia y los gastos de funcionamiento, según el PSPV. De hecho, frente a 74 representantes que tenía el pleno del CMH, las nuevas asambleas metropolitanas contarán con 90 miembros, cargo que recae sobre el alcalde o concejal delegado del partido gobernante en cada ayuntamiento. 'Este sistema hace posible que de los 156 votos ponderados, 93 correspondan al PP y los 63 restantes a los partidos de la oposición, con el agravante de que el 48% de los votos del PP corresponden a Valencia', afirma Ros. Dicha ponderación garantiza la mayoría absoluta al PP y el control del área por la capital, lo que reduce el poder de los alcaldes de L'Horta y deja en manos de Valencia el control absoluto de la gestión de residuos y el servicio en alta del agua potable, dos áreas estratégicas que el PP no descarta privatizar.

En materia de financiación, el texto del PP beneficia más a Valencia y propone como principal fuente de recursos las aportaciones de los ayuntamientos a través de los tributos del Estado. Sin embargo, según la ley de Presupuestos del Estado de 2000, Valencia recibe en este concepto tres pesetas más por habitante que los pueblos de menos de 5.000 habitantes, y dos pesetas más que los que tienen más de 50.000 habitantes como Torrent. Esto significa que porcentualmente los pequeños municipios pagarán más que los grandes.

El PSPV propone un único ente que asuma, además de la gestión de residuos y ciclo del agua, la planificación territorial, urbanística y de transportes. Este modelo es parecido al de las conurbaciones de Lille, Boston, Montreal y Frankfurt.. En cuanto a la financiación, el PSPV propone, además de las aportaciones municipales, la obligación de la Generalitat a incluir en su presupuesto anual una cantidad fija para financiar el gasto corriente del área metropolitana.

Por otra parte, en la distribución del poder político, el PSPV recoge la filosofía de la ley de modificación del CMH de 1995, que establece un sistema de representación en la asamblea según las listas más votadas los municipios. Este modelo, que regula 626 votos ponderados repartidos en 74 representantes, permitió gobernar al PP-UV en la pasada legislatura, y al PSPV-EU en 1999 por un breve periodo de tres meses.