El juez Guzmán se dispone a procesar hoy a Pinochet por la 'caravana de la muerte'

Guzmán trabajó la mañana del sábado en la elaboración de dos resoluciones: una, respondiendo a la solicitud de los abogados de las víctimas que pidieron el miércoles el rápido procesamiento criminal de Pinochet; y la otra, contestando a la defensa del ex dictador que pidió el sobreseimiento del acusado, sobre la base del resultado de los exámenes psiquiátricos y neurológicos que arrojaron una demencia vascular subcortical progresiva. Según diversas fuentes próximas al juez Guzmán, hoy se harían oficiales las dos resoluciones sobre el futuro judicial de Pinochet. Las mismas fuentes aseguran que Guzmán insistirá en el procesamiento del octogenario jefe militar, retomando los argumentos que esgrimió el pasado 1 de diciembre, decisión que luego fue anulada por la Corte Suprema por considerar que se necesitaba escuchar al acusado antes de procesarlo, es decir, un mero trámite que ya se cumplió el pasado martes.

En diciembre, el juez procesó a Pinochet en su calidad de coautor intelectual del delito de secuestro calificado seguido de homicidio en los casos de los 18 desaparecidos, y de homicidio calificado en los casos en que los cuerpos de las víctimas han sido encontrados. Es decir, para esa fecha, Guzmán tuvo la presunción fundada de la responsabilidad de Pinochet en los crímenes de la caravana de la muerte.

Guzmán se ha reunido con los detectives de la policía que colaboran en su investigación y, al parecer, ya está planificada la diligencia por la que se debe notificar a Pinochet de su paso a la calidad de reo y cómo los funcionarios judiciales deben fotografiarlo y tomarle las huellas digitales de todos los dedos de la mano. Por tanto, más que el inminente procesamiento, la duda que incluso tenían ayer los cercanos a Guzmán era si éste aceptaría sobreseer a Pinochet después de que dicte su procesamiento.

Lo cierto es que el juez tiene tres alternativas. Primero, dictar sólo su procesamiento y seguir adelante con el juicio hasta lograr una condena. Segundo, sobreseer solamente, lo que acarrearía para la justicia chilena una serie de problemas con la jurisprudencia que beneficiaría esencialmente a violadores y asesinos en serie que también han mostrado algún grado menor de demencia o psicosis. Y tercero, procesar y después sobreseer, escenario que, a juicio de allegados a la causa, parece el más probable.

En todo caso, en cualquiera de estos tres escenarios, tanto la defensa como la acusación optarán por presentar recursos ante los tribunales superiores, lo que alargará la definición del juicio a Pinochet, al menos, hasta marzo. Los abogados querellantes trabajaron el fin de semana en establecer la jurisprudencia que les permita evitar que se consume el sobreseimiento.

El encargado de esta tarea es el abogado y diputado socialista Juan Bustos, quien trabaja esencialmente con el libro del jurista Alfredo Etcheverry titulado simplemente Jurisprudencia, en el que aparecen algunos casos de condenados a los que se les hizo un diagnóstico similar al de Pinochet, pero que no por ello eludieron la justicia, sino que, en algunos casos, se les benefició con una rebaja de la pena en uno o dos grados.

El caso más reciente que estudian los querellantes es el del llamado Chacal de Coelemu, quien violó y asesinó a golpes a un niño de 11 años en junio de 1998. El juez de primera instancia condenó al autor a presidio perpetuo. La sentencia fue apelada ante un tribunal superior, instancia que dictaminó la pena de muerte. Ante un recurso de revisión, el proceso llegó hasta la Corte Suprema, que en mayo de 2000 rebajó a prisión perpetua la pena de muerte sobre la base de un informe psiquiátrico que lo retrató como 'una persona que posee una inteligencia considerada como propia de una debilidad mental leve'. Los querellantes esperan reunir casos de asesinos que hoy cumplen condena a pesar de ser 'dementes'.