Fraga fuerza la dimisión del consejero de Agricultura por ordenar el depósito de reses muertas de Mesía

Las vacas locas han abierto una crisis política en Galicia a pocos meses de las próximas elecciones autonómicas. El consejero de Agricultura, Cástor Gago, tuvo que asumir ayer todas las responsabilidades por la incapacidad del Gobierno autónomo, del PP, para cumplir las normas sobre prevención de la encefalopatía espongiforme bovina (EEB) y fue forzado a dimitir. Horas antes, el Bloque Nacionalista Galego (BNG) había presentado la primera moción de censura contra el ejecutivo que preside Manuel Fraga e invocó como motivo su 'ineptitud' llevada al 'paroxismo' con la crisis de las vacas locas.

La aparición en Galicia de tres casos de EEB ha colocado a Fraga en el trance más amargo de los 11 años que lleva gobernando la comunidad autónoma. La semana pasada, tuvo que reconocer por primera vez que cedía a la presión popular para clausurar el vertedero de vacas muertas de Mesía (A Coruña), admitido por él mismo como ilegal. Y, ayer, también por primera vez, entregó la cabeza de un miembro de su Gobierno ante los ataques generalizados por la gestión de la crisis de las vacas locas.

El Gobierno gallego estaba en una situación muy comprometida tras el descubrimiento, el pasado día 30, de que había enterrado 282 vacas muertas y 53 toneladas de harina cárnica en una mina abandonada de Mesía. El vertedero se abrió sin avisar a los vecinos que viven a 200 metros de la mina, sin previo informe ambiental y vulnerando las normas comunitarias y españolas que obligan a quemar las reses muertas en las explotaciones. El propio Gago envió un escrito el pasado martes al juzgado de Ordes (A Coruña), que tramita varias denuncias por los hechos de Mesía, en el que se responsabilizaba del enterramiento ilegal.

Ayer, Fraga canceló todos sus actos públicos y viajó a Madrid por motivos que la Xunta no quiso especificar. Al mediodía, fuentes de su Gobierno confirmaron que el consejero de Agricultura iba a abandonar el cargo de forma inminente, después de que la cadena SER anunciase la noticia. Fraga regresó de Madrid a media tarde y reunió al 'gabinete de crisis' sobre las 'vacas locas', en el que participan los consejeros de Agricultura, Medio Ambiente, Sanidad y Presidencia.

Antes de entrar en la reunión, Gago declaró a Efe que no tenía intención de renunciar. Apenas una hora más tarde, la Presidencia de la Xunta anunciaba oficialmente la dimisión de Gago y el nombre del sustituto: Juan Miguel Diz Guedes, muy polémico por las actuaciones de la policía durante su etapa como delegado del Gobierno en Galicia, pero también muy apreciado por Fraga, quien le convierte en una especie de 'superconsejero de vacas locas. La crisis política podría comprometer los planes iniciales de Fraga de adelantar a finales de la primavera las elecciones autonómicas que deberían celebrarse en octubre.