Baleares pierde 25.000 millones al ser declarado nulo un impuesto

El Tribunal Constitucional dictaminó la inconstitucionalidad y nulidad de una ley fiscal autonómica de Baleares, que el Gobierno del PP en 1991 tramitó en el Parlamento regional con la finalidad de gravar a las instalaciones y la actividad de las grandes empresas de infraestructuras y energía por el impacto que causan sobre el medioambiente insular. Esta sentencia supondrá una pérdida de 25.000 millones de pesetas en las arcas de la Comunidad balear -que había calculado el cobro de unos 3.000 millones anuales por este concepto- por los abonos y los cobros previstos no ejecutables. La implantación del impuesto quedó ya congelada hace ya una década debido a las acciones legales de las empresas afectadas y porque, en 1992, el anterior Gobierno central presentó un recurso al considerar que el Parlamento balear violó la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades autónomas.

"Habrá endeudamiento público y no es una buena noticia para las finanzas pero era una amenzada prevista", explicó el consejero de Hacienda, Juan Mesquida, al comentar la sentencia del Constitucional. La comunidad balear, que ya había cobrado 5.000 millones deberá devolver estos ingresos más sus intereses -unos 7.500 millones-. Además, las autoridades autonómicas estaban pendientes de cobrar 13.500 millones de pesetas por este concepto, sin contar con los 3.300 que contaban con ingresar por esta vía en 2001. Actualmente, el presupuesto balear es de 160.000 millones.

La ley fiscal, según la sentencia del Constitucional, ha sido anulada porque "invade competencias locales y no grava directamente actividades contaminantes, sino la titularidad de unas determinadas instalaciones". Además, asegura el texto, la ley "desconoce el impacto ambiental" de los sujetos afectados.

El ecoimpuesto particularizado estaba dirigido a las propiedades de las compañías nacionales de gran envergadura: eléctricas, petroleras, telecomunicaciones y cementeras: CLH ex Campsa, Gesa Endesa, Telefónica, Repsol Butano, Portland, entre ellas.