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El PP modifica 27 leyes con 70 enmiendas a la Ley de Acompañamiento en el Senado

El PP ha vuelto a utilizar el Senado para corregir y aumentar la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos. Con sus 70 enmiendas a una norma que cuenta con 69 artículos pretende modificar 27 leyes que afectan a todos los impuestos, a la Ley de Telecomunicaciones o al Estatuto de los Trabajadores, entre otras. De algunas de estas enmiendas, como la que blinda a Iberia ante la pérdida de derechos de vuelo por la entrada de socios extranjeros, no se informó públicamente. Tampoco de la que da a la Comisión Delegada atribuciones para fijar las tarifas telefónicas. Otras dos se han retirado en apenas unas horas. Se trata de la tasa sobre informes para fusiones y la nueva regulación del espacio radioeléctrico.

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Hace dos años, el PP recibió un aluvión de críticas por presentar 110 enmiendas a la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de 1999 que modificaban 25 leyes. Las fundaciones sanitarias y la compensación de 1,3 billones de pesetas a las compañías eléctricas fueron las que provocaron mayor escándalo y una tormenta política que, en parte, continúa. La primera medida es hoy un fracaso y la segunda está abocada a lo mismo. Hubo precipitación y un intento, que se volvió en contra, de no debatir en el Parlamento cuestiones espinosas. El caso es que el PP aprendió la lección el pasado año y sólo presentó 26 enmiendas, pero ahora ha vuelto a las andadas. La ley se creó durante la etapa socialista como consecuencia de una sentencia del Tribunal Constitucional y cada año se ha hecho más amplia y farragosa.

La correspondiente al año 2001 entró en el Congreso a principios de octubre con 59 artículos, diez disposiciones adicionales y cuatro transitorias. A su paso por el Congreso, el número de artículos se ha convertido en 69, hay 22 disposiciones adicionales y cinco transitorias.

Ahora el PP en el Senado presenta otras 70 modificaciones que afectan a parte de esos artículos y, en su mayoría, son de adición. Es decir, la ley ganará en literatura, además de afectar a 27 leyes. A su entrada en el Congreso la ley modificaba ya 38 normas que ahora, en su mayor parte, se vuelven a retocar, pese a que no han pasado ni dos meses.

Entre las enmiendas, algunas son de cierta importancia pero han tenido una vida efímera. Apenas unas horas después de que fuera presentada y anunciada públicamente por el PP en el Senado, se decidió retirar la enmienda que elevaba la tasa que se cobra por los informes que elabora el Tribunal de Defensa de la Competencia para dictaminar procesos de fusión. Esa tasa iba destinada a sufragar los 50 millones de pesetas en que aumentará el presupuesto del Tribunal.

Otra enmienda retirada es la que regulaba "las facultades del Gobierno para la gestión del dominio público radioeléctrico". Lo que se pretendía era preparar el camino para que el Gobierno pudiera disponer libremente del espacio radioeléctrico que utilizan las empresas de telefonía móvil y las cadenas de radio y televisión, entre otras.

Damián Caneda, portavoz popular en el Senado, explica que "la retirada responde a que se ha pensado que es mejor profundizar un poco más, abrir un periodo de consultas y situar esa medida en un marco más amplio". En términos generales, Caneda niega que el PP haga un uso abusivo de la Ley de Acompañamiento.

"A nadie nos gusta"

"Es una norma que no nos gusta a casi nadie", reconoce, "aunque en esta ocasión las modificaciones no son de gran calado y se justifican porque 'acompañan' a la política económica que sustenta a los Presupuestos". No es el caso de, por ejemplo, la enmienda que fija las "competencias en materia de variedades protegidas de semillas o plantas de vivero", la que afecta al denominado Patrimonio Comunal Olivarero o la que reduce el IVA para las lápidas funerarias.Es cierto que las enmiendas del PP en esta ocasión no tienen la trascendencia general del famoso billón de las eléctricas, pero sí hay medidas de alcance. Por ejemplo, la que regula el régimen del cuerpo único de notarios (18 páginas) o la que exime del silencio administrativo positivo a un buen número de gestiones burocráticas (24 páginas).

También es de calado la que pretende proteger a Iberia de la posible pérdida de derechos de vuelo (acuerdos entre el Gobierno español y el de otros países fuera de la UE) en el caso de su venta a una empresa extranjera. O la que modifica el Estatuto de los Trabajadores en lo que respecta al sistema de registro de los contratos en el Inem.

Otras enmiendas tienen relevancia para el juego de poderes entre distintos ministerios. Por ejemplo, la que adjudicará a la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos las competencias sobre la fijación de tarifas telefónicas, incluida la tarifa plana de Internet. Hasta ahora, esa competencia estaba repartida entre los ministros de Ciencia y Tecnología y de Economía. Éste último, es decir, Rodrigo Rato, es quien preside la Delegada.

El resto de enmiendas son ya conocidas pues, a diferencia de las anteriores, el PP sí que informó de ellas. Se trata de la ayuda de 120.000 pesetas para el cambio de coches de gasolina por otros menos contaminantes; la exención del impuesto de matriculación (12%) para los monovolúmenes comprados por familias numerosas; o la posibilidad de que los ayuntamientos amortigüen el impacto fiscal de las revisiones catastrales.

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