Los polígonos creados en el Bages no atraen nuevas industrias

El desorden urbanístico en el proceso de reindustrialización en la comarca del Bages ha creado unas 400 hectáreas de polígonos que no son aprovechables, que no forman parte de lo que se denomina oferta efectiva y que no contribuyen a resolver la situación de bloqueo que hay en el mercado de suelo industrial en la comarca, lo cual comporta que prácticamente cada gran implantación industrial propuesta precise de otro nuevo polígono. Las 400 hectáreas desocupadas son más de la mitad del terreno de uso industrial de la comarca, que se sitúa en unas 790 hectáreas.Un estudio sobre el Bages dirigido por Joaquim Solà, profesor de la Facultad de Económicas de la Universidad de Barcelona, pone de manifiesto que la necesidad de los municipios de disponer de espacio para nuevas empresas y suplir el vacío que creó, principalmente, la crisis del sector textil, ha propiciado la aparición de polígonos industriales que no han llegado a su plena ocupación y que no han tenido en cuenta la organización comarcal. Se trata de un modelo "expansivo y desestructurado", que "ni es eficiente ni sostenible", dice Solà.

Para desbloquear la situación existente en el ámbito de los terrenos industriales, dice Solà, "es necesaria la intervención del sector público porque la respuesta de los agentes privados no ha sido suficiente para crear una solución eficiente". El director del estudio aboga por la creación de un órgano específico de gestión que en el trabajo aparece como Promoción Industrial del Bages (PIB) y que tendría como función más destacada la agilización del proceso de urbanización para poner en el mercado el terreno que ofrezca las mejores condiciones.

Entre las causas del desbarajuste, además de la necesidad de captar nuevas empresas, se señala que la provisión de suelo responde, a veces, a intereses distintos a los de la promoción industrial, como puede ser la captación de ingresos a través del IAE. También aparece como un interés añadido que puede favorecer el crecimiento general de un municipio por los efectos inducidos en la construcción de viviendas.

Zona de expansión

El Bages es una comarca con muchas posibilidades de ser receptora de nuevas implantaciones industriales en Cataluña, ya que Barcelona y su entorno tienen escasas ofertas por la alta ocupación. La centralidad del Bages, la mejora de las comunicaciones por carretera y la misma oferta de polígonos industriales, a bajo precio, aparecen como principales atractivos. Del análisis se deduce que el proceso de reindustrialización ha supuesto una suplantación del tipo de actividad industrial, en la que el sector textil ha dejado paso a la metalurgia, la química y la alimentación. Se considera que las alternativas industriales, más diversificadas, han permitido superar las crisis laborales generadas por el cierre de empresas, pero se alerta que el paro entre la mujer es muy elevado, con tasas que superan el 15%.