Jueves negro en Tierra Santa
Las imágenes de centenares de palestinos atacando a unos soldados israelíes el jueves en Ramala son lo suficientemente graves como para hacer irrelevante si los linchados fueron dos o tres. La confusión reinante sobre la suerte de los otros dos militares que les acompañaban hizo creer que había tres víctimas mortales."Así parecían indicarlo las primeras informaciones, pero de momento sólo hemos recibido un cuerpo y no puedo asegurarlo", manifestó cauto el primer ministro israelí, Ehud Barak, en conferencia de prensa. Poco después, la radio estatal La Voz de Israel aseguraba que el Ejército había confirmado la muerte de un tercer soldado. No fue así.
Sin embargo, a los dos militares israelíes habría que añadir más tarde la muerte de un niño palestino, herido dos días antes en Rafah, con lo que se elevó a un centenar el número de muertos en esta segunda Intifada; además, 13 policías palestinos que intentaron rescatar a los soldados y 36 civiles alcanzados por los bombardeos israelíes de represalia se sumaron a los cerca de tres mil heridos.