Dos muertos y 17 afectados por un brote de 'legionella' propagado en pleno centro de Vigo

Dos personas han muerto y 17 han resultado afectadas (11 de las cuales permanecen hospitalizadas) por un brote de legionella en Vigo. Las autoridades sanitarias, que consideran el brote controlado, sitúan el foco infeccioso al aire libre, en la torre de refrigeración exterior de algún edificio del mismo centro de Vigo (entre la Gran Vía y la plaza de España). En esa concurrida zona se encuentra también el hospital Xeral, uno de cuyos trabajadores murió el pasado día 3 con síntomas parecidos a los de la legionella, aunque de momento no se ha podido confirmar que tuviese la enfermedad.

Gestos tranquilizadores

Los primeros casos, de lo que en principio se atribuyó a una neumonía atípica, se produjeron a finales de septiembre. Dos de los afectados murieron días después en el hospital Xeral, uno el 3 de octubre y otro el 5. El virus afectó a 17 personas más, de las que 11 permanecen ingresadas en el centro sanitario, cuatro de ellas en la unidad de cuidados intensivos. Aunque han aparecido algunos casos entre menores de 40 años, la inmensa mayoría son varones de entre 60 y 80.Los análisis toxicológicos confirmaron esta semana la existencia del brote de legionella. Sin embargo, no se ha podido verificar, de momento, si la neumonía atípica padecida por otros cinco pacientes ha sido causada por el mismo virus. Entre ellos figura un trabajador de las oficinas del hospital, de 34 años, que murió el pasado día 3 y cuyo caso aún no se ha esclarecido. Hace dos años, en el mismo hospital se produjo otro brote de legionella que también afectó gravemente a uno de sus empleados. Sin embargo, en esta ocasión las autoridades sanitarias están convencidas de que el foco infeccioso no se encuentra en el edificio. "Todos los enfermos presentaban los síntomas antes de su ingreso y ningún otro paciente del hospital resultó afectado", declaró ayer Pilar Farjas, directora general de Salud de la Xunta de Galicia. Además del trabajador fallecido, otros dos empleados del centro sanitario, uno de ellos un médico, sufrieron neumonías en los últimos días, pero en su caso se diagnosticaron como típicas, lo que excluye la posibilidad de la legionella.

La hipótesis de las autoridades sanitarias es que el foco infeccioso se encuentra cerca del hospital pero al aire libre, entre las calles Pizarro y Gran Vía y la plaza de España, en pleno corazón de la ciudad. Los 19 afectados vivían en la zona o transitaban asiduamente por ella. Aunque entre los enfermos hay algunos residentes en Redondela, una localidad del extrarradio de Vigo, se ha comprobado que todos ellos frecuentaron en las últimas semanas la zona descrita. La legionella se cultiva en el agua y sólo se transmite por inhalación cuando el líquido se dispersa. De ahí que la Consejería de Sanidad de la Xunta conjeture que el foco infeccioso estaba en la torre de refrigeración de aire acondicionado de algún edificio de la zona, cuyos vapores inhalaron los afectados. Además del hospital, de momento se han revisado otros dos inmuebles, un hotel y un centro comercial.

En todo caso, se cree que el foco infeccioso ya ha desaparecido. "Desde el pasado día 5, no se ha producido ningún otro caso", declaró Pilar Farjas. "Como el periodo de incubación de la enfermedad es de dos a diez días, eso nos permite pensar que la situación está controlada. La lluvia de los últimos días también puede haber ayudado a eliminar el foco". El Ayuntamiento de Vigo ha clausurado las dos fuentes ornamentales que hay en la zona y suspendido los riegos de agua.

Para tranquilizar a la población, tanto las autoridades sanitarias de la Xunta como el alcalde, el nacionalista Lois Castrillo, han insistido en que no es necesario tomar medidas de prevención. "La gente puede usar el agua y bañarse con tranquilidad, porque se descarta la contaminación del abastecimiento de aguas", aseguró Farjas. Desde la pasada semana, en el hospital Xeral de Vigo se había creado cierta psicosis tras el descubrimiento de algunos casos de neumonía entre el personal del centro. Además, el número de ingresos por esta enfermedad alcanzaba el medio centenar. Tras los fallecimientos, la dirección del hospital comunicó la situación a la Xunta, que envió muestras al Instituto Nacional de Toxicología, donde el pasado lunes se confirmó la presencia del virus en 19 de los pacientes. A los trabajadores, que habían pedido explicaciones a la dirección, se les comunicó la noticia el martes y se les aseguró que el foco infeccioso era exterior al centro. De momento, la junta de personal no duda de las explicaciones oficiales, aunque pide más información. "Desde que apareció el anterior brote, hace dos años, los controles en el hospital son muy rigurosos", admitió un portavoz de la junta.