Querella contra Pinochet en Chile por un sacerdote desaparecido
Nueve sacerdotes, cuatro de ellos españoles, presentaron ayer en la Corte de Apelaciones de Santiago una querella criminal contra el general Augusto Pinochet y tres ex agentes de la DINA (la policía política) por su responsabilidad en el secuestro y torturas del sacerdote español Antonio Llidó Mengual, en 1974, en plena dictadura militar. Llidó Mengual integra desde entonces la lista de los detenidos desaparecidos en Chile. La querella contra Pinochet es por secuestro calificado, torturas y asociación ilícita. Según la querella, que es la número 174 presentada contra Pinochet, Llidó, ordenado sacerdote en el seminario de Valencia, llegó a Chile en julio de 1969, centrando su trabajo misionero en Quillota. Se adhirió a los Cristianos por el Socialismo y apoyó el Gobierno de Salvador Allende. Después del golpe de Estado de 1973, al verse buscado por las fuerzas de seguridad de la dictadura, se trasladó a Santiago y después a Valparaíso, donde se ocultó.
Antonio Llidó fue el único religioso desaparecido durante la dictadura militar chilena. Fue detenido en Santiago el 1 de octubre de 1974 por una patrulla militar, que, según consta en el proceso, lo entregó a efectivos de la DINA. Después fue llevado a un recinto de torturas, desde donde fue trasladado el día 24, junto con otros prisioneros, con destino desconocido. La querella incluye los testimonios de siete de sus compañeros de detención, quienes cuentan que Llidó era brutalmente golpeado y le aplicaban electricidad en su cuerpo durante varias horas seguidas.
En las sesiones, sus torturadores le pedían nombres de personas y el sacerdote contestaba que no podía darlos por sus "principios", recuerdan.
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