_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

La Gaite

Juan José Millás

A esta hora de ambulatorios y autobuses, de niebla y miedo, una mujer inaugura un cuaderno inquietante en un piso alto de Doctor Esquerdo. A dos pasos de Manuel Becerra, una de las plazas más caóticas de Madrid, y enfrente casi del Palacio de los Deportes, hay un piso con cocina antigua en el que trabaja Carmen Martín Gaite. La Gaite no es budista, al contrario, está llena de pasiones: abandona el tabaco con la misma violencia con la que vuelve a él, y si no está de humor, no tiene inconveniente en hacerlo notar. Sin embargo, le saca punta a los lápices y redondea los adjetivos con la paciencia de un maestro zen.Nunca ha tenido prisa por acabar un libro. Pero los acaba, los va acabando en ese piso alto de Doctor Esquerdo, cuyo pasillo está lleno de fantasmas con los que Carmen Martín Gaite ha llegado a alguna clase de acuerdo para no coincidir a la misma hora en el cuarto de baño.

Más información
El mundo literario llora y elogia a Carmen Martín Gaite, escritora pionera y vitalista

De todos modos, cuando estas presencias espectrales rompen la disciplina, ella se cala una boina de la Resistencia francesa y se va unos días al Palace como si fuera una extranjera. Cuando regresa, los espectros le dan un homenaje, porque no pueden vivir sin la música de su máquina de escribir. Por ellos, esta princesa se ha quedado prisionera en ese piso alto de Doctor Esquerdo cuya terraza es, en realidad, una almena.

A esta hora de ambulatorios y autobuses, de niebla y miedo, Carmen inaugura un cuaderno inquietante en ese piso de Doctor Esquerdo en el que se ha ido haciendo mayor con el esmero, pero con la desesperación también, con que ha escrito sus mejores libros.

Casi todos son el resultado de un pacto con lo oscuro, con el cuarto de atrás, aunque ella ha tenido el coraje literario de vivir en el de delante, lo que le agradecemos públicamente desde aquí. Enhorabuena y gracias, Carmen.

Juan José Millás publicó este artículo dedicado a Carmen Martín Gaite en la última página de EL PAÍS el 25 de noviembre de 1994.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Juan José Millás
Escritor y periodista (1946). Su obra, traducida a 25 idiomas, ha obtenido, entre otros, el Premio Nadal, el Planeta y el Nacional de Narrativa, además del Miguel Delibes de periodismo. Destacan sus novelas El desorden de tu nombre, El mundo o Que nadie duerma. Colaborador de diversos medios escritos y del programa A vivir, de la Cadena SER.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_