La Fundación Santillana exhibe la obra cosmopolita de Darío de Regoyos en la Torre de Don Borja

La Fundación Santillana celebra este verano el vigésimo aniversario de su establecimiento en la Torre de Don Borja, en Santillana del Mar, con una exposición de la obra de Darío de Regoyos (1857-1913). Jesús de Polanco, presidente de la fundación, lo recordó ayer para exaltar la importancia del pintor asturiano, celebrando que muchos de los cuadros se exponen por primera vez en una muestra pública.El historiador Javier Tusell calificó a Regoyos como "el pintor más cosmopolita de la España de su época". "Había", dijo, "motivos importantes para celebrar esta exposición y reeditar a una persona que conoció a lo más vanguardista del arte internacional de su tiempo y actuó como verdadero maestro del arte contemporáneo". Recordó Tusell que Ortega le calificó de "pintor franciscano" precisamente por su amor a la naturaleza.

En el acto intervinieron también Joaquín Puig de la Bellacasa, director general de Bellas Artes; Juan San Nicolás, y el vicepresidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Revilla.

Muerto en plena madurez artística, sin cumplir todavía los 57 años, Darío de Regoyos no tuvo en vida oportunidad de conocer el reconocimiento pleno a su intenso quehacer artístico. Cincuenta de sus cuadros, procedentes de colecciones públicas y privadas, colgados ahora en la Torre de Don Borja, constituyen en cierto modo la última de las reivindicaciones que a través de los años se sucedieron tras su desaparición.

La exposición, abierta hasta el 24 de septiembre, está llamada a convertirse en un gran acontecimiento cultural, de especial interés para miles de habitantes de toda España esperados este verano en Santillana. Fue entre Asturias, Cantabria y el País Vasco, preferentemente, donde Regoyos pasó gran parte de su vida. Delicado pintor de la naturaleza, descubrió, sin desprenderse nunca de su caballete, los más pintorescos rincones de esta parte de España y también de las tierras altas de Castilla, sin olvidar sus campañas de trabajo por el sur de Francia.