El Gobierno aclara que la tarifa plana no valdrá para todo el día

El Gobierno tiene intención de aplicar la tarifa plana para Internet (un precio único e independiente del tiempo de utilización de la red) sólo en el llamado horario reducido: entre las seis de la tarde y las ocho de la mañana, además del fin de semana completo. El Ministerio de Ciencia y Tecnología se afanó ayer en matizar así la cota de 3.000 pesetas al mes anunciada el día anterior por su titular, Anna Birulés.

El departamento de Ciencia y Tecnología se movilizó ayer para disipar ante la opinión pública la impresión de que la tarifa de 3.000 pesetas mensuales para universalizar el uso de Internet podrá utilizarse a cualquier hora del día. En realidad, se trata de reservarla al horario reducido: de seis de la tarde a ocho de la mañana y los fines de semana todo el día. El objetivo es "favorecer al usuario residencial" y evitar el colapso de la red, aseguró un portavoz del ministerio. De ahí que la tarifa plana vaya enfocada al mercado doméstico y no a las empresas, que tienen acceso a una tarifa plana (6.500 pesetas al mes) a través de la red ADSL. Además, el ministerio argumenta que plantear una oferta "muy agresiva" hubiera generado una avalancha de internautas hacia la red en el horario punta, lo que provocaría una sobrecarga en la mañana y "graves problemas de saturación".

"Hemos comprobado que la propuesta de la ministra llevaba truco", resumió ayer el portavoz socialista en materia de Ciencia y Tecnología, Alfredo Pérez Rubalcaba, tras una comparecencia de Anna Birulés en el Pleno del Congreso. La ministra eludió dar cifras en esa comparecencia parlamentaria -las aclaraciones a los medios informativos se produjeron después- y enmarcó la implantación de una tarifa asequible dentro del ámbito general de liberalización de las telecomunicaciones, y en especial del bucle local de telefonía.

Los socialistas interpretan estas matizaciones como un jarro de agua fría para los usuarios. Birulés "se ha dejado llevar por la furia propagandística y ha defraudado a los internautas", dijo el diputado socialista. Rubalcaba retomó en el Pleno del Congreso la propuesta de tarifa plana diseñada por su grupo parlamentario durante la pasada legislatura: 3.000 pesetas al mes para una conexión válida durante las 24 horas, 2.000 para el horario punta y 1.000 para el reducido. Rubalcaba discrepó de los criterios utilizados por el Gobierno para justificar la aplicación de la tarifa plana especialmente para usuarios residenciales y argumentó que mucha gente usa la red "como herramienta de trabajo" y en horario laboral.

Plan 'Innove'

Mientras tanto, la senadora socialista Mercedes Aroz -de la formación Entesa Catalana, que agrupa al PSC, Esquerra Catalana e Iniciativa per Catalunya- presentó ayer una proposición de ley para que se destine una importante cantidad de recursos, en torno a los 200.000 millones de pesetas, a subvencionar la compra de ordenadores, siempre que esa adquisición conlleve un alta en un proveedor de acceso a Internet.

Esta proposición recupera los trabajos previos que se llevaron a cabo en el Ministerio de Fomento, durante la etapa de Rafael Arias-Salgado como ministro, que no llegaron al Parlamento ni formaron parte del programa electoral del PP.

La autora de la proposición de ley entiende que la mayor recaudación prevista a través de los impuestos permite dedicar fondos a extender el uso del ordenador, condicionándolo a que, además, sea para conectarse a Internet. "En lugar de destinar 400.000 millones de pesetas a reducir el déficit, como ha dicho el ministro Montoro, sería mucho mejor aportar la mitad de ese dinero a un Plan Innove que amplíe el parque de ordenadores y las conexiones a la Red", explica Aroz. La subvención beneficiaría a usuarios particulares y empresas de hasta seis empleados, que suponen dos tercios de las pequeñas y medianas empresas españolas. La propuesta de Aroz consiste en subvencionar con 75.000 pesetas la compra de cada ordenador hasta un nivel de renta de 3,5 millones de pesetas; y con 45.000 pesetas a las rentas superiores.