Directores de colegios piden al Gobierno un debate sobre los comedores escolares

El futuro de los comedores escolares en los centros de enseñanza pública ha sido debatido esta semana en San Sebastián por cerca de un centenar de directores de estas escuelas. Alrededor de 20.000 alumnos comen a diario en comedores públicos. Los educadores son partidarios de que los comedores formen parte de la Educación Infantil. En la octava edición de Topaketak (Encuentros), la Asociación Sarean critica al Departamento de Educación del Gobierno vasco por no trabajar en colaboración con ellos.

Ochenta directores de centros públicos de Educación Infantil y Primaria del País Vasco se han reunido en San Sebastián para analizar, entre otras cuestiones, la problemática de los comedores escolares. Tan sólo en aquellas escuelas de gestión directa, que suponen más del 80% de los centros públicos de Euskadi, se da de comer a 19.784 alumnos.En los últimos años, según el coordinador de Sarean, Andoni Lizeaga, se ha registrado un incremento importante en el número de alumnos que no interrumpen su asistencia al centro a mediodía al recibir la comida en éste. Los responsables de las escuelas reclaman trabajar en coordinación con el Departamento de Educación del Gobierno vasco, al que critican por publicar decretos sin contar con los centros escolares y por emitir órdenes que afectan directamente a éstos sin contar en ningún momento con ellos.

Tanto Educación como los socios de Sarean creen que el servicio de comedor escolar debe estar integrado en la oferta escolar y tener carácter educativo. Sin embargo, los directores dicen que "para que el tema no se quede en pura filosofía tiene que haber una capacidad de recursos importante para responder a la demanda", indicó Lizeaga.

Modificar la normativa

El Gobierno vasco aprobó el pasado mes de marzo un decreto que regula el funcionamiento de los comedores escolares. Según la normativa, este servicio es competencia del equipo directivo del centro. Los participantes en los encuentros Topaketak piden al Ejecutivo vasco "volver a negociar este decreto y que se modifique en aquellos aspectos que sea mejorable".

Los directores integrados en la asociación Sarean cuestionan la figura del responsable del comedor que, según el decreto, corresponde al director y al equipo directivo de la escuela. Con la aplicación del nuevo decreto, las familias de los escolares van a pagar una cantidad superior a la que desembolsan por confiar en el colegio la manutención del niño. Los alumnos que no utilizan el transporte para acudir a la escuela, indicó Andoni Lizeaga, verán incrementada la cuota en un 16%, un aumento que no se explican, por excesivo, los directores de los centros.

Otra de las cuestiones que critican los responsables de los centros de la enseñanza pública vasca es que los comedores se tengan que abastecer de un proveedor homologado para poder alimentar a los alumnos. En la Comunidad Autónoma Vasca tan sólo hay una empresa dedicada a este cometido, aunque el Departamento de Educación ha asumido el compromiso de ampliar este número hasta seis. Piden mayor flexibilidad en la contratación directa, sobre todo en las localidades enclavadas en zona rurales, donde se puede buscar un suministrador más próximo.

Cada alumno transportado, aquel que tiene que utilizar el transporte para asistir a clase, paga por la comida 250 pesetas al día; los no transportados, que son la mayoría, 360 pesetas, y para el resto la tarifa es de 450 pesetas. El menú básico es de 290 pesetas diarias. El Departamento de Educación que dirige Inaxio Oliveri tiene previsto becar a todas aquellas familias que lo necesiten.