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La batalla por controlar la Caja Vital llega hoy a su momento clave con la votación de los clientes

Además de las elecciones generales de manaña, en Álava se celebran hoy otros comicios en los que los partidos políticos se han empleado, al menos, con el mismo ahínco: la elección de los 41 representantes de los clientes que integrarán la Asamble General de la Caja Vital y cuyos votos serán decisivos para hacerse con el control de la entidad financiera más importante de Álava. Por primera vez desde la creación de la Caja Vital -fruto de la fusión de las cajas municipal y provincial-, la hegemonía del PNV en los órganos de poder de la entidad está en apuros.

La Caja Vital es la primera de las tres entidades de ahorro principales de Euskadi en renovar sus órganos de dirección tras las elecciones municipales y forales celebradas el pasado mes de junio. Los comicios locales depararon en Álava una modificación en el liderazgo político en las instituciones locales, tradicionalmente dominadas por el PNV y que ahora son gobernadas por el PP.Durante las últimas semanas, el PNV y las formaciones no nacionalistas -PP, PSE y Unidad Alavesa han creado la Plataforma por la pluralidad- se han empleado a fondo para captar las simpatías de los 410 clientes (designados por sorteo), que elegirán entre ellos a 41 compromisarios, aunque sólo 21 de éstos (los más votados mañana) tomarán posesión de manera inmediata y podrán participar en la elección del nuevo Consejo de Administración el próximo 30 de marzo. Los otros 20 se harán con sus cargos en 2002.

Los representantes de los ahorradores tienen la clave del color político que tendrá la Caja Vital los próximos cuatro años, ya que la mayoría de los otros 59 integrantes de la Asamble General (designados por los municipios de la provincia, la Diputación de Álava y el Ayuntamiento de Vitoria) ya se han decantado. En estos momentos, nacionalistas y no nacionalistas consideran que han llegado a un "empate técnico". Además de los votos de mañana, también se mantienen dos incógnitas: lo que van a hacer los cinco representantes del comité de empresa y otros cuatro compromisarios de impositores, que se han agrupado en torno a una candidatura fomentada por el presidente de la Cooperativa Vitoriana de Vivienda (Covivi), José Antonio Gordo. Éste se ha constituido en una especie de grupo de presión entre los nacionalistas y no nacionalistas y aspira a alguno de los votos que se emitirán hoy.

La de por sí crispada vida política vasca ha encontrado en la pugna por controlar la Caja Vital otro motivo de enfrentamiento. Los partidos de la Plataforma por la pluralidad han enviado cartas a sus afiliados animándoles a convencer a alguno de los 410 representantes de los impositores para que voten por la candidatura no nacionalista. Mientras, el PNV también ha invitado por carta a sus militantes a no perder comba en la pugna por hacerse con la Caja Vital y en su misiva ha lanzado mensajes como "PP y PSOE han iniciado una lucha a muerte por intentar la no participación del PNV en los órganos de gobierno de la Vital. Es una continuación de la batalla antinacionalista iniciada por los estatalistas".

El PNV se refiere así a la decisión tomada en enero por PP, PSE y UA de monopolizar la representación de los 22 consejeros que nombran el Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación alavesa (ambas gobernadas por PP y UA con apoyos puntuales del PSE) en la Asamblea General de la Vital. Ésta fue su respuesta a la negativa nacionalista a dejarles un hueco en la comisión que se encarga de velar por la pureza del proceso electoral en la entidad.

Fuentes del Partido Popular recalcaron ayer que la candidatura integrada por los no nacionalistas es "firme", que no va a desgajarse y que ninguna de las formaciones que la componen pactará con el PNV. "El objetivo (de la plataforma) es romper con el monopolio nacionalista", dijeron.

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Por su parte, el presidente de la comisión electoral, Miguel Ángel Redondo (PNV), destacó su impresión de que el proceso se había desarrollado con "transparencia" por lo que no caben acusaciones de "falta de limpieza" como las lanzadas en algún momento desde el ámbito no nacionalista.

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