Bruselas exige a los Quince que devuelvan 40.000 millones de ayudas agrarias

Bruselas exigió ayer la devolución de 237 millones de euros (39.433 millones de pesetas) del Feoga-garantía gastados de manera irregular por los Estados miembros entre 1996 y 1998, a los que hay que añadir 38,5 millones de euros (6.405 millones de pesetas) de 1995. Los problemas de control en las restituciones a la importación de productos agrarios y la violación de las reglas comunitarias son la causa principal de las irregularidades.

A España se le descontarán 1,1 millones de euros (183 millones de pesetas) en la próxima liquidación del presupuesto agrícola. Francia es el país de la UE al que la Comisión Europea exige la mayor devolución de fondos, en concreto 120,9 millones de euros en el periodo 1996/98. La corrección para Italia es de 84,2 millones de euros (14.000 millones de pesetas), para Portugal y Alemania de 21,9 millones de euros respectivamente (3.643 millones de pesetas) y para el Reino Unido de 21 millones de euros (3.494 millones de pesetas). Bruselas está pendiente de pronunciarse sobre otros 500 millones de euros (83.193 millones de pesetas) que están siendo tratados por el comité de conciliación y no habrá decisión de la Comisión Europea hasta antes del verano. "O bien se produce un uso adecuado de los recursos o si no se tiene que recuperar el dinero", declaró en rueda de prensa el comisario europeo de Agricultura, Franz Fischler.

"La Comisión Europea no titubea al hacerse cargo de sus responsabilidades, por eso exigimos a los Estados miembros la devolución de 275,5 millones de euros y otros 500 millones todavía están dentro del procedimiento de liquidación de cuentas", añadió. Para recuperar estos recursos, lo que hace Bruselas es recortar un porcentaje de las subvenciones que recibe el sector agrícola donde se han producido las irregularidades en una horquilla que varía entre el 2% y el 25%. "La ventaja es que no tenemos que esperar a que las sumas en cuestión sean devueltas y lo que hacemos es, en la próxima liquidación, retirar la cantidad sin más", explicó.

La mayor parte de las irregularidades se deben a "falta de controles físicos en las restituciones a la importación" de productos agrícolas en Francia, Italia, Alemania y el Reino Unido, que ascienden a 160,7 millones de euros (26.738 millones de pesetas). También se detectaron debilidades en los sistemas de control en las primas al ganado en Irlanda, Portugal, Francia y Reino Unido, que exigen una corrección de 26,1 millones de euros (4.342 millones de euros), y en las subvenciones al cereal en Portugal y el Reino Unido, que suponen 18,2 millones de euros.

La Comisión pretende garantizar un empleo adecuado de los fondos y recuperar los que han sido utilizados irregularmente. La política agrícola de la UE se lleva prácticamente la mitad del presupuesto, 40.805 millones de euros en 1997. Fischler destacó la importancia de realizar "una vigilancia pertinente al empleo de este dinero público", aun si el gasto agrícola representa el 0,6% del PIB de los Quince.

Los errores detectados en el Fondo de Garantía Agraria son del 3%, "pero queremos ser mejores", explicó Fischler, que se ha puesto como objetivo un 0,5%.