Aragón prepara un ambicioso programa de ayudas para frenar la despoblación La comunidad centra su esperanza de supervivencia en el asentamiento de inmigrantes

El Gobierno de Aragón centra la supervivencia de la comunidad en el asentamiento de inmigrantes que contribuyan a desarrollar un territorio tan envejecido como extenso. El ejecutivo aragonés, formado por el PSOE y el Partido Aragonés Regionalista (PAR), aprobó ayer una comunicación demográfica, que remitió a Las Cortes para que se traduzca en un programa demográfico con medidas concretas. Aragón tenía hace dos años 1.183.234 habitantes y habrá perdido un 3,4% de su población entre 1981 y 2005. En el caso de Teruel, esa pérdida ascenderá al 15%.

El texto aprobado ayer por el Ejecutivo de Aragón análiza la situación de la comunidad y propone tres medidas: el apoyo a la familia, la ordenación del territorio y políticas de asentamiento de inmigrantes en un momento en que, en palabras del vicepresidente del ejecutivol, José Angel Biel, del PAR, "nos podemos quedar sin comunidad autónoma en unos pocos años y los pocos que seamos estaremos en Zaragoza".Los datos son elocuentes. De los 730 municipios de la región, 77 estaban, entre los años 1981 y 1991, en fase terminal, con el 40% de su población por encima de los 65 años. En el años 2001 serán 422 los municipios que estén en esa situación. Sólo crece Zaragoza y algunas poblaciones grandes.

Aragón habrá perdido entre 1981 y el año 2005 el 3,4% de su población. Huesca verá disminuir su población en un 6,%; Teruel, en el 15%, y Zaragoza, la única que ha crecido un 1,7%, comenzará su declive y habrá perdido el 0,5% de habitantes.

El vicepresidente regional advirtió ayer que las medidas de apoyo a la familia no van a hacer aumentar el número de nacimientos. "Vivimos en Europa y hoy ya nadie piensa en una mujer que sólo se dedica a tener hijos", dijo.

175.000 jóvenes menos

La comunicación del Ejecutivo aragonés centra la solución a la crisis en el apoyo a asentamientos de inmigrantes. "Necesitamos gente y deberíamos dar las gracias a quienes vienen a trabajar y favorecer su permanencia entre nosotros. No encuentro otra manera de asentar la población que traer gente de fuera. Pero hemos de hacerlo bien", dijo el número dos del gobierno aragonés.

Las medidas propuestas buscan el asentamiento de las familias en un territorio de 47.000 kilómetros cuadrados donde viven 1.200.000 personas, de las que 600.000 están en Zaragoza. La integración de los inmigrantes busca fórmulas "que les permita ser participantes activos en la vida económica, social, cívica y cultural". Para ello, se propone unificar los puntos de información donde centralizar el servicio jurídico y de asesoramiento; el diseño de un protocolo de resolución de problemas, y la elaboración de un catálogo de recursos sociosanitarios dirigidos a estos colectivos.

También se propone la regulación del mercado de trabajo. El ejecutivo cree que es fundamental ordenar el sistema de acceso al empleo y la integración de los inmigrantes en el Plan de Formación Ocupacional del Gobierno de Aragón. El grupo de empleo debe de garantizar que se cumpla la normativa laboral y de seguridad social, tanto para trabajadores estables como para temporeros. Se busca la contratación de los trabajadores en origen, se intentará asentarlos en el área rural con medidas específicas "a través del desarrollo de yacimientos de empleo", y se buscará el reagrupamiento familiar.

Se formará a los trabajadores, para favorecer su acceso al empleo y se fomentará su promoción profesional, se les formará en materia de seguridad laboral y se les garantizará la asistencia sanitaria a todos, legales, o ilegales.

Se trata de buscas nuevos vecinos y de poner a su alcance los recursos de la administración autónoma en pie de igualdad con los vecinos de la comunidad. Las medidas proponen el trabajo con las asociaciones de inmigrantes y colectivos que trabajan con ellos.

En Aragón se pierden jóvenes año tras año. En 25 años -de 1981 al 2005- habrá 175.000 jóvenes menos . El medio rural se despuebla, se cierran escuelas y falta mano de obra para realizar numerosas actividades. El vicepresidente del Gobierno recordaba ayer que nadie discute en la comunidad que la única alternativa es importar mano de obra pero no temporalmente. "Hay obras que no pueden terminarse porque no se encuentran personas para hacerlas".

En Aragón, según la UGT, hay 12.000 emigrantes, el 40% europeos y el 39% africanos, en su mayoría magrebíes. La paradoja es que, faltando mano de obra, sobre todo fuera de Zaragoza, los contingentes adjudicados han sido escasos. En 1999, la cifra fue de 150 emigrantes para Huesca; 47 para Teruel, y 545 para Zaragoza, un contingente que fue duramente criticado por sindicatos y ONG,s.