El campo español exige la libre circulación en la UE tras el conflicto con Francia

El sector hortofrutícola español exportó en 1998 por un volumen cercano a los nueve millones de toneladas, valoradas en casi 900.000 millones de pesetas, el 90% hacia los países de la UE. Casi la totalidad de las operaciones se hacen por carretera, lo que supone afrontar problemas como los de la pasada huelga de transportistas en Francia. El sector pide a la UE que asegure la libre circulación de mercancías y no se limite a establecer vías alternativas.

Para los productores españoles no hay alternativa a la carretera para este transporte, aunque se corra el peligro de encontrarse con problemas en las carreteras francesas, como los generados por la pasada huelga de transportistas y los que se producirán en el caso de que en España se lleve a cabo la huelga prevista para finales de este mes. En el sector se considera que la salida a estos conflictos no es buscar vías alternativas coyunturales para evitar el bloqueo de fronteras, sino que Bruselas asegure la libre circulación de mercancías por los países comunitarios.

El sector hortofrutícola español supone aproximadamente el 20% de la producción final agraria y es el más agresivo e innovador, tanto en política de producciones como para la apertura de nuevos mercados. Al margen de las oscilaciones de campañas, anualmente las exportaciones ascienden a casi nueve millones de toneladas con un valor cercano a los 900.000 millones de pesetas.

Entre las producciones más importantes en el comercio exterior destacan los 3,6 millones de toneladas de cítricos, casi 900.000 toneladas de tomates, más de 400.000 toneladas de pimientos o lechuga, 400.000 toneladas de coles, 380.000 toneladas de melones, 325.000 toneladas de sandías, 321.000 toneladas de pepinos o las 220.000 toneladas de fresas.De estas cantidades, prácticamente la totalidad se comercializa en Europa y casi el 90% solamente en los países comunitarios. De los 8,7 millones de toneladas exportadas en 1998, 7,7 millones correspondieron a países comunitarios y 932.000 toneladas al resto de Europa.

Esta fuerte dependencia del sector de los mercados europeos ha hecho que la logística del sector para la comercialización de esta materia prima se haya volcado en el transporte por carretera, aunque ello supone graves riesgos cuando se producen situaciones como el bloqueo de las carreteras francesas, fenómeno que se ha repetido en varias ocasiones durante los últimos años.

Esta apuesta por la carretera para el transporte de la exportación hortofrutícola ha dado lugar al desarrollo de una gran flota de camiones dedicada solamente a este sector casi todo el año, que se eleva a unos 7.000 vehículos con una capacidad media de 20 toneladas.

El desarrollo de la logística para este transporte supone en este momento la posibilidad de colocar un producto desde el punto de recolección al punto de destino en un país europeo en un plazo medio, según países, de entre las 30 y las 72 horas como es el caso del Reino Unido.