Muy pocos hospitales cumplen las normas de identificación de bebés

La última normativa para la identificación de recién nacidos en España está vigente desde 1996, pero muy pocos hospitales la aplican. El estudio sobre la identificación del recién nacido en la red sanitaria pública española que han realizado las matronas Margarita Luque y Beatriz Tosal llega a la conclusión de que todavía no existe un método fiable para identificar a los recién nacidos de forma inmediata.El estudio, dirigido por el profesor de la Universidad de Alicante Miguel Richart, se elaboró a partir de un cuestionario de 46 preguntas enviado por correo a 152 hospitales, de los cuales contestaron 55. De ellos, sólo un 13% cumplía alguno de los requisitos estipulados por la legislación vigente. El principal de estos métodos es imprimir la huella dactilar del recién nacido, y ninguno de los centros lo pone en práctica.

De estas cifras no se deriva necesariamente un mayor riesgo de confusión a la hora de identificar a los bebés. Según puntualiza Margarita Luque, en España no se produce un mayor número de errores que en otros países y, en todo caso, siempre existen métodos a posteriori que permiten subsanar posibles equívocos. "La prueba del ADN deja garantizada la identificación. El problema es que no se puede hacer inmediatamente y, hasta que llega ese momento, las madres están angustiadas", aclara Luque.

El método de identificación más generalizado son las pulseras con cierre de seguridad. Lo utilizan 48 de los hospitales consultados. Le sigue la utilización de tinta indeleble para pulseras o huellas.

Según las autoras del estudio, la mayor parte de los hospitales combina varios sistemas para incrementar la seguridad. En el 81,8% de los casos, la identificación del neonato se realiza antes de sus cinco primeros minutos de vida. Pese a no acatar estrictamente la legislación, los hospitales españoles parecen razonablemente seguros: sus respuestas sólo reconocen reclamaciones por parte de nueve madres, y sólo en una ocasión uno de los centros tuvo que asumir una denuncia.

El estudio concluye que éste es un tema ante el que las madres se encuentran especialmente sensibilizadas. Luque y Tosal proponen un cambio de filosofía. En su opinión, los hospitales españoles son muy dados a separar muy pronto y durante demasiado tiempo a las madres de los recién nacidos. "Siempre que sea posible, se ha de facilitar que la madre no pierda de vista al niño", sentencian, aunque saben que "ni la estructura organizativa ni la distribución espacial de los hospitales lo facilitan".