El PA desata la primera crisis en Granada y dice que romperá su pacto si se bloquea el bono turístico

Los impedimentos legales puestos por la Junta de Andalucía para la entrada en vigor del bono turístico en Granada han supuesto la primera crisis seria en el gobierno tripartito formado por el PSOE, Izquierda Unida y el PA. El andalucista Jesús Valenzuela, concejal de Cultura, Turismo y Deportes, confirmó ayer que romperá el pacto si el gobierno local no hace nada para poner en marcha el bono turístico de forma inmediata. El PSOE replicó inmediatamente que el bono es irrenunciable para Granada y que, pese a la Junta, se superarán todas las trabas legales.

El conflicto tiene su origen en las declaraciones realizadas el pasado viernes en Granada por la consejera de Cultura, Carmen Calvo, en las que ponía en duda la legalidad de rebajar en un 30% los precios de entrada a monumentos como la Alhambra, que es una de las ofertas del bono turístico, un proyecto que se viene persiguiendo en la ciudad durante los últimos tres años y que es uno de los grandes objetivos de Valenzuela. El concejal de Cultura fue ayer claro y contundente: calificó de "bochornosa" la situación y pidió a la Junta de Andalucía que deje de poner trabas a la implantación del bono. "Yo ya advertí que si no había voluntad política de sacar adelante el bono", dijo, "se rompería el pacto". "Es un tema muy serio y si hubiera que romper el pacto, lo romperíamos", repitió. El bono turístico, uno de los puntos acordados en el pacto de gobierno tripartito, es un proyecto que lleva ya tres años dando vueltas y que permitiría descuentos del 30% para acceder a los principales monumentos de la ciudad a lo largo de tres días, lo que facilitaría las pernoctaciones de turistas. Carmen Calvo no cree que la Consejería de Economía dé su visto bueno al proyecto. "Tengo serias dudas de que nos autoricen a rebajar tasas y precios públicos", dijo el viernes. A Calvo le replicó el propio alcalde de Granada, el socialista José Moratalla, quien manifestó que, aunque respeta la legalidad, el bono debe implantarse a toda costa. En la misma línea se expresó ayer su segundo teniente de alcalde, José Antonio Aparicio, quien dejó bien claro que es un objetivo "irrenunciable" para el equipo de gobierno. "El PSOE está totalmente comprometido con esta iniciativa", declaró. "El proyecto estaba en nuestro programa y en el pacto de gobierno. Vamos a reclamar su implantación en el menor plazo de tiempo, salvando los escollos jurídicos y políticos. Para nosotros no hay el menor atisbo de renuncia", dijo. El equipo de gobierno no descarta posibles encontronazos con la Junta. "Los intereses de Granada están por encima de cualquier otro interés", dijo Aparicio, "y esos intereses de Granada pasan por la implantación del bono turístico".