_
_
_
_
_

Un informe del PP describe a la sanidad andaluza como un "caos"

Tereixa Constenla

La situación de la sanidad andaluza se resume, según el secretario regional del PP, Antonio Sanz, con tres pinceladas: caos financiero, incompetencia política y ruina económica. Sanz apoyó sus acusaciones en el informe elaborado por su formación, que eleva a 70.000 el número de pacientes en la lista de espera del SAS y a 207.000 millones de pesetas la deuda global. Los dirigentes del PP, que pedirán un debate general en el Parlamento, acusan al Gobierno andaluz de haber desaprovechado los 171.000 millones de pesetas transferidos desde 1998 por el Ejecutivo central para "solucionar el caos".

El secretario regional del PP, Antonio Sanz, acusó al Gobierno andaluz de reducir sus aportaciones presupuestarias a la sanidad conforme se han incrementado los recursos transferidos desde el Gobierno estatal, previstos en el acuerdo de financiación sanitaria. Andalucía recibió del Insalud 65.000 y 106.000 millones de pesetas en 1998 y 1999, respectivamente, para política sanitaria. Por el contrario, según Sanz, la Junta de Andalucía ha reducido sus aportaciones propias al capítulo sanitario de 43.474 millones de pesetas en 1996 hasta los 21.918 millones de pesetas del actual ejercicio. El dirigente regional del PP, además de criticar esta rebaja en los recursos propios, pidió cuentas por el uso de los 171.000 millones de pesetas transferidos desde Madrid que, en su opinión, tendrían que haber sido destinados a remediar "el caos". "Queremos saber para qué ha servido ese dinero", agregó el portavoz del PP en la comisión de sanidad, Guillermo García Trenado. El parlamentario se apoyó en los datos del informe de su formación para asegurar que las transferencias estatales no se habían aprovechado ni para inversiones -alegan que la reforma de atención primaria sigue pendiente en 103 centros- ni para rebajar la deuda con proveedores, que cifran en 85.000 millones de pesetas. El último informe de la Cámara de Cuentas, según el PP, establece, además, que la deuda global del SAS alcanza los 207.000 millones de pesetas, que se desglosa en tres capítulos: 149.958 millones a deudores y acreedores, 26.000 millones para farmacia y 30.000 millones con la Seguridad Social. Andalucía es, sin embargo, la comunidad autónoma que más ha contenido el crecimiento del gasto farmacéutico. La morosidad del SAS a la hora de pagar a proveedores -el PP asegura que la demora media es de 571 días- está encareciendo los productos sanitarios. "En Andalucía cuestan el doble que en el resto de España", aseveró Sanz. Un segundo efecto, según García Trenado, tiene una vertiente judicial: el TSJA ha dictado 230 sentencias en dos años que obligan al SAS a pagar alrededor de 6.000 millones de pesetas por intereses de demora en el pago de proveedores. García Trenado aseguró que las denuncias presentadas por la Federación Nacional de Empresas de Instrumentos Científicos, Técnicos, Médicos y Dentales (Fenin) para exigir el pago de productos al SAS alcanzan los 14.000 millones de pesetas. Junto a la disección financiera, el informe del PP analiza la situación de las reformas de atención primaria y salud mental, además de las listas de espera. El secretario regional del PP, Antonio Sanz, responsabilizó directamente al presidente andaluz, Manuel Chaves, de borrar "de un plumazo" los programas presupuestarios dedicados a reducir las listas de espera del SAS, que afectan, según el PP, a 70.000 andaluces. "La demora media supera los 200 días desde que se considera necesaria la intervención quirúrgica", agregó Sanz. El secretario de organización del PSOE de Andalucía, Luis Pizarro, replicó ayer que las acusaciones del PP respondían a un intento "de desviar la atención del debate del día, la subida del butano".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Tereixa Constenla
Corresponsal de EL PAÍS en Portugal desde julio de 2021. En los últimos años ha sido jefa de sección en Cultura, redactora en Babelia y reportera de temas sociales en Andalucía en EL PAÍS y en el diario IDEAL. Es autora de 'Cuaderno de urgencias', un libro de amor y duelo, y 'Abril es un país', sobre la Revolución de los Claveles.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_